viernes, 19 de febrero de 2021

LOS VAMPIROS DE LA MENTE - DAN SIMMONS



        


        Esta gigantesca novela (obra de un autor que suele hacer novelas bastante gigantescas), cuyo titulo original es Carrion Comfort, publicada en 1989, es la clásica historia de monstruos cazadores de hombres, y de un grupo de personas que deciden tomar para si la responsabilidad de destruirles. De cazar a los monstruos. Y esto costara la vida a más de uno (AVISO: Simmons no se anda con tonterías, podéis encontraros con vuestro personaje favorito muerto a la mitad del libro tranquilamente). Pero una de las particularidades del libro es que los monstruos, en esta ocasión, son hombres y mujeres. Como tú y como yo. O casi. Camuflados entre nosotros, seres con una mente tan sádica que apenas cabe considerarlos de humanos, se alimentan de la muerte: pero no por sustento, no para sobrevivir. Por placer. Una novela digna de la histoires terribles de Clive Barker, un festival de sangre y muerte, una gigantesca partida de ajedrez donde las fichas son seres humanos. ¡Bienvenidos al juego más mortífero del mundo!

        Empecemos por presentar un poquito al autor: Dan Simmons es un autor estadounidense bastante prolífico, especializado en género de terror y a veces ciencia ficción. Aparte de escritor, Simmons es profesor especializado en literatura, y como tal, tiene en su base de datos una increíble cantidad de conocimientos históricos o sobre grandes libros famosos, a los que a veces hace referencias y guiños. Su obra más famosa es la cuatrilogía de Los cantos de Hyperion, una ciencia ficción sin pelos en la lengua que no se corta nada a la hora de incluir aspectos bastante terroríficos. Otra de sus obras más famosas es The Terror, que tiene una adaptación cinematográfica, una serie rodada por la HBO.

        Ahora bien: cuando antes dije este libro era una partida de ajedrez gigantesca no me está tomando ninguna licencia artística al hacer esta reseña. Simmons escribió verdaderamente el libro como una partida de ajedrez, dividido en 3 grandes capítulos: Apertura, Medio Juego y Juego Final. Y las referencias al ajedrez, a las fichas, y a la partida, están por toda la novela, otorgando un ritmo intenso que va in crescendo hasta el final. Dicho sea de paso, está mucho mejor hilado que en El ocho (1988) y El fuego (2008), por si a alguien le habían venido a la cabeza esas novelas de “ficción ajedrecística”.


Explicación de la obra y breve resumen. 

        Bien, vamos por el principio, la novela comienza desde el minuto uno con la premisa de que en el mundo existe una sub-especie de humanos, o una estirpe antigua, no está claro, con una capacidad especial: son capaces de someter a los demás usando la mente, convirtiéndolos en esclavos. Pueden usar a cualquier persona como una marioneta y ver a través de ellos. Esto les permite matar a cualquier persona sin estar presentes, y cargarle el crimen a cualquier inocente. Además de este poder, estos seres, que más adelante serán llamados “vampiros de la mente” o simplemente monstruos o vampiros, son perfectos psicópatas. No sienten ninguna empatía por nada ni nadie, disfrutan infringiendo dolor y sembrando muerte, son criaturas de puro instinto, todo placer y oscuridad. Y como sanguijuelas, se esconden entre la humanidad para a través de sus marionetas satisfacer sus siniestros apetitos.

        Si ya os ha atraído la novela, deteneos aquí. Con este resumen ES MAS QUE SUFICIENTE PARA SUMERGIRTE EN ESTA OBRA. Pero si necesitáis mas, a continuación voy a analizar la situación de la que parte la novela y presentar a algunos de sus personajes, pero habrá algunos spoilers. De todos modos no me extenderé mas allá de la pagina 150 aprox., cuando la novela queda definitivamente planteada (tranquilos, tiene casi 1.000 paginas, queda mucho sin contar). 

        Al principio conocemos a tres de estos monstruos, ubicándose la acción en EE.UU en el momento de publicación de la novela, esto es, finales de los 80 (1989, concretamente). Melanie Fuller, una de estas aberrantes criaturas, es una las principales protagonistas del libro, y paradójicamente, la única personaje cuyos capítulos viviremos en primera persona, lo que nos permitirá apreciar de primera mano los sentimientos y pensamientos de uno de estos seres. Melanie es una vieja arpía del sur de EE.UU, heredera de una fortuna sureña. Sus dos acompañantes, tan malévolos (o más) que ella, son Nina Drayton, una importante y estilosa mujer de negocios, y Willi Borden, un europeo de misterioso pasado (más adelante comentaremos que pasado) y actualmente, un prestigioso director de Hollywood. Por el contexto, extraemos que tienen entre 60 y 80 años, se conocen casi desde críos, y llevan unos 40 años mínimo reuniéndose para intercambiar las anécdotas de sus asesinatos y juzgar al campeón del año. Pero cuando Melanie anuncia en su última reunión, que ha decidido abandonar el juego, se desata una mortal cadena de consecuencias: esa misma noche Nina entra en acción e intenta asesinar a través de marionetas humanas a Melanie, quien se defiende, y en la batalla resultante, que se salda con la muerte de Nina y la huida y desaparición de Melanie (a quien seguiremos viendo en capítulos que se alternaran por todo el libro), un rastro de cadáveres que se han asesinado entre ellos cubrirá la ciudad y dejará muy desconcertados a la policía. La partida ha comenzado.



Melanie Fuller, en la portada de una edición de EE.UU. El pelo azul y la pinta de cadáver son dos de sus características físicas.

        El sheriff Joe Gentry, hombre inteligente aunque con sobrepeso, no sabe ni por dónde empezar, y se unirá a Natalie Preston, una fotografía afroamericana cuyo padre fue una de las víctimas de la batalla, y juntos comenzarán a alcanzar las respuestas al conocer al doctor Saul Laski, un psicólogo judío especialista en la mente de los psicópatas. Laski es un superviviente nato, y no solo porque sobrevivió al Holocausto durante la II Guerra Mundial, pasando mucho tiempo interno en un campo de exterminio hasta que logró escapar, y se unió a unos partisanos hasta el fin de la guerra. También conoció a esos monstruos, concretamente al Oberst (coronel, en alemán) Wilhelm Von Borchet, un oficial y aristócrata nazi, y aunque logró escapar con vida del encuentro, quedó tan marcado que ha dedicado el resto de su vida a dar caza a ese monstruo y todos los miembros posibles de su “raza”. Y tras tantas décadas (sin resultados), esta vez cree haber dado con el rastro: Laski está convencido de que lo ocurrido es obra de esos seres, y de echo descubrirán que Willi, el productor, no es otro que el Oberst, quien está bien escondido preparando su jugada. Pero, ¿contra quién está jugando? ¿Contra ellos? ¿Un sheriff de pueblo, una fotógrafa negra y un psicólogo judío? No parece probable. 

        Simmons no tardara en mostrarnos la respuesta: y es que existen muchos mas miembros de esa extraña raza de los que Laski pensaba. Agazapado en las sombras de las más altas esferas de los Estados Unidos, existe un temible club social cuyo nombre algunos conocen, pero nadie dice: el Island Club. Sus miembros y dirigentes son todos usuarios de ese extraño poder, además de personajes clave del país: el jefe del gabinete de un senador de Maine; un famosísimo reverendo y predicador con una enorme influencia en el mundo evangélico, con su propio canal de televisión; el director del F.B.I.;  etc. Y al frente de todos ellos un misterioso hombre de negocios y multimillonario, cuyos tentáculos parecen no tener fin (incluyendo la Casa Blanca): Barent. Son los hombres que al margen del partido que este en la presidencia en ese momento, verdaderamente gobiernan la nación. Y usan sus casi inagotables influencias y recursos para poder seguir satisfaciendo su hambre de dolor y muerte sin preocupaciones, y poder llevar a cabo sus juegos enfermizos. Estos hombres, preocupados por las actividades y movimientos de Willi/el Oberst Borchet, llevaban tiempo siguiéndole la pista y vigilándole a través de espías en sus círculos más íntimos, e incluso tenían comprada a su amiga Nina. Llegado un punto, decidieron dar orden a Nina para que matara a Willi, a quien tenían por un cabo suelto, y de paso a Melanie, tomándola por una anciana debilitada. 

        Lo que el Island Club no se esperaba es que el Oberst no es ninguna vieja reliquia decadente del Reich, es un usuario monstruosamente poderoso de la habilidad de control, y un hombre increíblemente astuto e inteligente, un jugador implacable y despiadado que pese a contar con muchísimos menos medios a su disposición y verse acosado y perseguido por las fuerzas de seguridad de medio país, será capaz de rivalizar y de echo marcar tantos constantemente a Barent y al Island Club, siendo la propia Melanie, aunque ella no lo sabe y cree que actúa solo para sobrevivir, una de sus fichas más importantes. Hacía mucho que el Oberst sabía de la existencia del club y de su vigilancia, si lo había soportado era para prepararse. La traición de Nina no le pilló desprevenido, y aprovechó la confusión para desaparecer mientras dejaba que Melanie (quien también es mucho mas peligrosa de lo que el club se temía) se viera obligada a defenderse y asesinara ella misma a la traidora. Ahora que la partida ha comenzado, su objetivo es vencerles para instaurar un juego mayor: la guerra completa y total. Un Age of Empires o un Total War pero con personas de verdad, perder un punto significaría una ciudad exterminada; razas enteras sometidas para su placer, por apuestas. El viejo coronel es un amante de la guerra, un depredador total y sin control; Barent desea la dosificación del dolor para mantener su buen estilo de vida, pero el coronel quiere la destrucción absoluta del mundo en una carnicería extática, un glorioso Ragnarok, donde él pueda satisfacer todos sus apetitos de golpe. Para quien lo haya visto, me recuerda mucho al Mayor de Hellsing, el villano final de la serie. Joder es que hasta es un nazi también. Y se le describe como un hombre algo gordito, no muy alto, sonriente, etc. 



   El Mayor, villano principal del anime Hellsing.



Todos morimos, peón, lo que Herr Barent no entiende es que no hay razón para que el mundo nos sobreviva.

 

-Destruiría todo el maldito mundo.
-Quizá. O quizá no. Pero la experiencia seria fascinante.


        En medio de toda esta situación, Natalie, el sheriff Gentry, y el Dr Laski (entre otros personajes que irán apareciendo, como unos pandilleros negros; algunos de los cuales nunca llegaran a conocer el alcance lo que esta en marcha) intentarán detener a ambos grupos improvisando como puedan, y tratando de demostrar “la fuerza de la hormiga”. Y es que su única oportunidad es que, en la batalla definitiva entre el Oberst y Barent, ellos no son considerados ni siquiera peones, apenas una mínima alteración estadística en una gran operación, y podrán construir una estrategia de ataque que quizás no vean venir.

 

        En esta epopeya de sangre y violencia, Laski visualiza en el Oberst todo el mal del Reich, e incluso todo el mal de la humanidad, y centra sobre él su venganza por todos los miembros de su familia, de su raza, que fueron exterminados, y por todas las personas que sucumbieron a la crueldad de la humanidad. Su necesidad de vencer es tan grande porque solo a través de su victoria podrá creer que existe bien en el mundo, si no vence, querrá decir que “ellos” llevan razón, y la humanidad es solo violencia y sadismo. Laski, pese a su edad, es el arquetipo del vengador. Además, también es una referencia al Doctor Van Hellsing, de Dracula, el viejo erudito que guía y lidera al resto de cazadores de monstruos. Al igual que los protagonistas de la novela de Bram Stoker, tienen una responsabilidad: solo ellos conocen la existencia de estos seres, y es improbable que puedan convencer a nadie mas del peligro que suponen, así que solo ellos pueden pararles. Es su responsabilidad.



Los monstruos no mueren. Tienen que ser exterminados.

 


        Dos bandos. Dos jugadores. Un grupo de depredadores sin piedad. Cientos de víctimas a la espalda cada uno. Y en medio, unas cuantas presas tratando de revelarse contra el destino que les ha sido encomendado: ser comida o vivir de rodillas. Puede que haya dicho que el libro es una gigantesca partida, pero también es la historia de un alzamiento.



-La justicia es exigida. Es exigida por millones de voces desde tumbas anónimas, desde hornos herrumbrosos, desde casas vacías en cientos de ciudades. Pero no la venganza. La venganza no es digna.
-¿Digna de qué?
-De nosotros. De ellos. De su muerte. De nuestra existencia.

         La novela es excelente, trepidante, veloz. Es una gozada leerla, los personajes están muy bien construidos: el judío que lleva cuatro décadas esperando su venganza, el coronel nazi manipulador que lleva el mismo tiempo escondido en las sombras de Occidente mientras sigue alimentándose de horror y muerte. La sociedad secreta de altos cargos del país al frente del hombre que manipula el bipartidismo estadounidense. Dan Simmons trata muchos aspectos, pero aun así no pierde el acento thriller, te lo ventilas en super poco tiempo. El estrés que rodea a esos siniestros hombres (o menos que hombres, cazadores sádicos de un tiempo pasado) es terrorífico, su frialdad, espeluznante. No necesitan hacer lo que hacen, lo hacen por simple placer, un festival de muerte. La critica fue muy favorable con la novela, ganando en 1989 el Premio Bram Stoker a la mejor novela, y en 1990 el Premio Locus a la mejor novela de Terror/Fantasía Oscura y el Premio August Derleth (este ultimo ahora forma parte de los British Fantasy Award).  




martes, 5 de enero de 2021

LA COSA DEL RIO, THE TROUT MAN - FERNANDO MOLERO CAMPOS


        La cosa del rio, escrita por Fernando Molero Campos en 2018, es casi un experimento académico en materia de literatura, y también, en cine (toda su inspiración es totalmente cinematográfica), dado que incluye elementos muy novedosos e ideas muy originales, que desarrollare más adelante. Ahora bien, no todos los experimentos son exitosos, y en mi opinión, este no lo es, pero ya llegare a eso.

        La obra se concibe en toda su extensión como un homenaje a las películas de terror de serie B de los años 50 (el autor incluye al final del libro una filmografía de más de 50 películas que le inspiraron, con títulos como Japón bajo el terror del monstruo o El experimento del Dr Quatermass), y contiene muchos elementos clásicos del género: científicos nazis, monstruos cutres, etc. También contiene lo que en mi opinión son los elementos más lamentables del género, que por una razón se abandonaron, y es que restan credibilidad y soltura a la trama.

        Lo más interesante del libro es que no solo es un homenaje a esas películas de los 50, el libro mismo se concibe como una película, en todos sus aspectos. Como si no tuvieras un libro en las manos, sino un DVD con extras incluidos, y al abrir las paginas, tú ya hubieras metido el disco, y empieza todo. En la primera página te viene, bajo el título de “Títulos de crédito”, una descripción de como abre la película, que tipo de música suena, como son las letras, etc. Después vienen varias páginas de inicio con la portada de le película, con el título, y los créditos (nombres de los actores), teniendo de fondo imágenes submarinas de un rio, y dicho rio va a ser gran parte del escenario de la película-libro y donde todo empieza. 







        Al final del libro tenemos contenido de “Extras”: descripciones de los personajes, la filmografía, el desarrollo del autor, etc. 

        Además, el desarrollo del argumento, la novela en sí, se sucede en forma de guion, con el nombre del personaje que habla en mayúsculas al inicio de cada frase, y la descripción de las escenas y los sentimientos de los personajes a nota explicativa, cuando procede. Los capítulos están divididos en escenas.




        Vamos con el argumento. La historia se ubica en un pueblo perdido de EE.UU en algún momento de los años 50 y comienza con dos amigos de la infancia reencontrados en la madurez que se van a pescar juntos: estos dos hombres son homosexuales, uno de ellos, Robert, el protagonista, nunca aceptó su sexualidad y se casó para ocultarlo, mientras que el otro, Peter, huyó del pueblo a la ciudad para no tener que esconderse. Ninguno de los dos jamás ha sido feliz, porque cada uno estaba enamorado del otro. Peter ha vuelto al pueblo para ver a Robert y confesarle su amor. Esta bucólica escena gay es cortada de golpe porque Peter se cae al rio y se lo comen unas truchas mutantes ultra agresivas, y Robert consigue huir en la barca, pero una trucha lo muerde. A partir de este momento Robert ira transformándose en una criatura medio hombre medio trucha que necesitara del medio acuático para vivir.

        Por otro lado asistimos a las ambiciones de un siniestro villano en la figura de medico nazi que escapó del hundimiento del Reich y se esconde cerca del pueblo, llevando a cabo sus malévolos experimentos para crear la raza genéticamente superior. No consigue un carajo, pero los vertidos de sus fracasos van a parar al rio y es lo que provoca esas truchas mutantes asesinas.

        La policía del pueblo no tardará en descubrir que algo pasa en el rio y que hay unas truchas que se comen todo lo que se acerca (hay varias víctimas, uno de los ayudantes del sheriff entre ellos). Solicitan ayuda a las autoridades superiores, y les envían a Harry, un guapo y bastante fantasma agente del FBI, y a Alex (Alexa), una ictióloga (científica de peces) que trabaja para el ministerio de Agricultura y Pesca. Hay unas cuantas escenas que son muy en plan la peli de Pirañas del 78 (no se cita en la lista, pero yo creo que tuvo que inspirar al autor), con las truchas siendo muy listas y haciendo cosas que no se esperan y comiendo de todo (a unas cuantas personas también). De pronto, sin apenas solución de continuidad ni demasiado nudo, se cargan la invasión con una especie de bomba que revienta todo bicho viviente (a Robert no) y a correr. Un arma secreta para erradicar formas de vida pero no estructuras que el ejercito se saca de la manga como quien mea, parece que una vez introducidas en la trama, el autor no sabia muy bien como sacar estos bichos para centrarse en la historia del hombre trucha. 



                                            Carátula de Pirañas (1978).  

    

                             Pirañas de la película Pirañas (1978). Podían ser las truchas mutantes.


        Por otro lado, el libro nos cuenta el drama que está viviendo Robert, que se está volviendo un pez caminante. Literalmente, una trucha gigante. El libro tiene componentes donde se ríe del género, tratando de reactualizarlo, por ejemplo en este caso no es una casualidad el pez mutante elegido, y en lo que se convierte: una trucha. “Trucha” es un método peyorativo para referirse a los homosexuales, lo que es Robert, y justamente es una trucha lo que lo ha mordido. Para más inri, el segundo título del libro es The Trout Man, sea, hombre-trucha.

        La humanidad de Robert desaparece cada vez más y pasa a vivir en el rio, desde donde toma venganza contra aquellos que cree que han actuado en su contra: por ejemplo ataca y se carga a un senador tradicionalista anti-homosexualidad (pese a que el mismo senador también era un gay reprimido). Es un poco como cuando el protagonista de La mosca (1986) de Cronenberg, Seth Brundle, se contamina con ADN de mosca, y se convierte en Brundle-mosca. Su personalidad va diluyéndose, es Robert-trucha, y cada vez mas trucha. El ser en el que se convierte, una criatura anfibia bastante primitiva y agresiva pero con sentimientos, es muy similar a Creature from the Black Lagoon (1954), la película en la que Del Toro se inspiró para el bicho de La forma del agua (los bichos de ambas películas sirven para imaginarse a nuestro Robert-trucha). No hay fotos en el libro de aquello en lo que se convierte (abajo dejo dos imágenes que guían perfectamente), pero yo creo que es lo que Molero Campos pensaba al concebir el libro. Desde luego Creature from the Black Lagoon (en español: La criatura de la Laguna Negra, aunque esta no es la Laguna Negra de Soria) es una de las principales inspiraciones del libro. Solo que el ser que se encuentran no es, como en la peli, una criatura prehistórica y ancestral (aunque los personajes de la siguiente escena de la novela creen que si) que lleva ahí ni se sabe cuantos años, y que una expedición se encuentra, secuestra a la chica, mueren algunos miembros del equipo, y bla bla bla. Es un pobre señor gay reprimido de un pueblo perdido, mutado por una trucha mutante fruto de los experimentos de un científico loco nazi. 

 

                                     Criatura de Creature from the Black Lagoon (1954)

                                                 Criatura de La forma del agua (2017)

        En los últimos compases del libro, entra una especie de forma de metacine (cine dentro del cine): a un director de cine de serie B se le ocurre grabar una película sobre una expedición que va a un rio a buscar al eslabón perdido y anfibio de la humanidad, y se encuentran a un siniestro hombre pez que secuestra al bellezón de la expedición (osea, la trama de Creature from the Black Lagoon). Y para rodarla eligen justamente el rio de Robert. Y Robert secuestra de verdad al bellezón. El director no deja de rodar en ningún momento (un poco como hace Jack Black en la adaptación de King Kong de Peter Jackson de 2005: ¡la película ha cobrado vida!), y de lo que él rueda, sale la película (libro) que estamos viendo (leyendo). De echo en esas primeras imágenes con la portada, el título, los créditos, etc. sale el nombre de la productora, y esta es precisamente Famelicus Film, la misma que la que esta grabando la película en la novela. Y el titulo de dicha película es, por supuesto La cosa del rio - The Trout Man.  

        El nombre de Famelicus Film, además de hacer chiste con la palabra "famelico", porque son pelis cutres, va dirigido a una legendaria productora británica de terror, fundada en los 60, y que llegó a rivalizar con la Hammer: Amicus Productions, también conocida como Amicus Films. Contando entre sus guionistas a escritores como Robert Bloch (Psicosis) y a actores como Christopher Lee (si, Saruman, entre otros papeles, como el villano de la peli de James Bond El hombre de la pistola de oro), esta productora se caracterizó por hacer menos énfasis en el terror clásico, donde reinaba la Hammer, y hacer un terror mas contemporáneo y con toques de humor e ironía del propio género. O sea, exactamente lo que pretende este libro-peli. La Amicus rodó películas como Las profecías del Dr Terror, La maldición de la calavera, o La bestia debe morir (The Beast Must Die!), e influenció a grandes directores y escritores de terror como David Cronenberg o Clive Barker, y puso las bases, entre otros, de sub-géneros como el "slatterpunk". 



                                      Caratula de The Beast Must Die! (1952), de la Amicus.


        Si cogemos este resumen casi parece una obra interesante, cómica, que se ríe de sí misma, desenfadada, y con guiños interesantes, como lo del hombre-trucha, o el metacine; y con mensajes contra la homofobia. Pero está plagada de fallos de concepto que le restan valor. Los más importantes son que las descripciones de las escenas son pesadísimas, exageradísimas. Están cargadas de un lirismo prosopopéyico y pedante que no encaja en absoluto en lo que se supone que es un desarrollo desenfadado y sencillo. Parece tratar de hacer un estilo recargado en plan Lovecraft, muy bello y estético, pero es un fracaso total, y le resta muchísima fluidez. Además los diálogos son mecánicos y forzados, nada creíbles, y muchas veces muy estúpidos. Todo el rato lo que lees te suena a barato. Además en mi opinión no cogió la mejor época del cine de terror para hacer este experimento, creo sinceramente que le hubiera quedado mucho mejor con la época de finales de los 70 a los 90. La era de Cronenberg, Wes Craven y John Carpenter.    


        El autor se emperró en escoger esta época, y arrastra con ellos muchísimos defectos: por ejemplo la escasa participación de las mujeres en todo aquello que no sea chillar o dejarse rescatar. Intenta compensarlo con Alex, la ictióloga, retratada como una excelente profesional y muy valiente, pero no le sale demasiado bien, porque fuerza su romance con Harry, el agente del FBI (cuando había 0 química entre ellos), y no destaca mucho. La personalidad de Harry es otro punto negativo: un machito inseguro que repetidas veces en el libro se obliga a intervenir cuando cree que está perdiendo protagonismo o llega a intentar competir por los amores de Alex con un periodista y con un subordinado del sheriff que colaboraba en la investigación (quienes no estaban en absoluto interesados en la científica). Sus intentos de llevar la trama al terreno irónico y humorístico fracasan por lo recargado del vocabulario y el estilo del autor, y por qué ha metido tantísima cantidad de ingredientes de ese cine de los 50, que ya es insalvable. El monstruo es cutre, pero en vez de hacernos gracia con ese terror absurdo de pelis exageradas que más que miedo nos dan risa (lo cual es su objetivo realmente), como Arac Attack, o La cabaña en el bosque, resulta aburrido. La simplificación de las tramas, componente clásico de las películas de terror absurdo, tampoco hace gracia, solo hace parecer la novela algo de mala calidad. La mezcla no está conseguida.

        Fernando Molero Campos pretendió hacer un homenaje risible en tono de comedia e ironía al terror de los 50, pero introdujo tantos elementos de ese terror, que se perdió la comedia, y la ironía prevalece solo captable desde el punto de vista académico, pero no llega a hacer gracia. Creo que su mayor fracaso es que con ese lenguaje recargado y esos diálogos forzados y poco creíbles perdió cualquier posibilidad de aportar un tono cómico a la novela, dando como resultado un libro estilo los años 50, o sea un ladrillo, poco interesante, y con cuatro detalles que intentan destacar sin conseguirlo. Pese a sus componentes cómicos, en conjunto resulta una trama absurda y ridícula.

        El terror de los 50, empezando por Creature from the Black Lagoon, de 1954, que es la inspiración del libro más fácilmente identificable, tuvo su importancia, pero su época se acabó. Se ha avanzado desde entonces, la propia era siguiente, la de la Amicus en los 60, entre otras productoras, fue mejor, más divertida, más atrevida. Ahora mismo, una película de los 50, y salvando alguna posible excepción (grandes triunfos como Planeta prohibido, o The Blob, o El Ojo: la criatura de otro mundo), es un peñazo. ¿Qué sentido tiene actualmente La Tierra contra los platillos volantes, película de 1956 pionera en el tema extraterrestre e invasiones? Académico, únicamente. Cualquier cosa que veamos en esa peli, ya la hemos visto en pelis más modernas, con medios mejores, actores mejores, y tramas mejor desarrolladas.

        Todo esto es también aplicable a las películas del “universo” de monstruos clásicos de la Universal Pictures anteriores a los 50 (de hecho la “saga” va desde los años 20 hasta acabar los 50), generalmente protagonizadas por Boris Karloff, Bela Lugosi y Lon Chaney Jr.: Drácula (1931), Frankenstein (1931)La momia (1932), La novia de Frankenstein (1935), La hija de Drácula (1936)El hombre lobo (1941),… Algunas, quizá en mayor número que las de los 50, como La momia, han conservado cierta frescura, pero en general están obsoletas. 

        La editorial que ha elegido publicar esta obra tampoco es una casualidad: Editorial Rosetta, unos especialistas en literatura de cine. Libros sobre cine, directores, estilos de películas, etc. Tienen uno sobre el director David Linch, otro sobre las películas de dinosaurios (Cinezoico), otro sobre la importancia de los Mitos de Cthulhu y H.P. Lovecraft en el cine y como han influenciado (Lovecraft: la alargada sombra del tentáculo), etc. En general es todo material divulgativo, que yo sepa no tienen ninguna novela aparte de esta. De echo yo me entere de la existencia de esta novela tras comprarme el de Lovecraft y el de dinosaurios (este para una amiga) y me intrigó. No era lo que esperaba y me decepcionó un poco, he de decir. Ahora la editorial ha cerrado y me temo que no existirán muchas copias de este libro. 

        Es mas, es un libro que ha llamado tan sumamente poco la atención, que prácticamente no existe ninguna reseña, ni critica, ni opinión, acerca de ella, quitando la mía, y un par de menciones realizadas en un diario de Córdoba, de donde es y donde vive el autor. Ningún otro bloguero la ha leído o la ha considerado digna de esforzarse en hacer una reseña. Vamos, creo que el momento de su mayor auge fue cuando Molero Campos la presentó en el instituto cordobés en el que imparte clase.

        En resumen es una curiosidad y yo soy un friki del cine (aunque los 50 no sean ni de lejos mi etapa preferida, he visto varias pelis de la época), y como tal lo guardo, pero como obra de entretenimiento, resulta muy pesada.





viernes, 18 de diciembre de 2020

DUNE - FRANK HERBERT



        Publicada en 1965, Dune fue, sin duda, tal y como citó en una ocasión Arthur C. Clarke (astrofísico y renombrado escritor del genero) a la ciencia ficción lo que El señor de los anillos fue a la fantasía. Del mismo modo, podemos asumir que Frank Herbert es el J.R.R. Tolkien de la sci fi. Dune es el manifiesto fundacional de las sagas de ciencia ficción de alta duración (muchos libros) y con muchísimo contenido de lore, y un universo prácticamente inabarcable, no solo por espacio, si no por contar con millones de años de historia. Y este libro es el primero de esa larga saga que continua a día de hoy de la mano del hijo de Frank, Brian Herbert, en coautoría con Kevin J. Anderson.

       La historia nos sitúa en un momento de la historia millones de años posterior al actual, la humanidad se ha extendido más allá de la Tierra, pero no a lo loco, en plan Star Wars. Solo una pequeña fracción de la impensable cantidad de planetas han sido habitados, la humanidad está dispersa por el Universo. Esta humanidad desperdigada está  gobernada por un frágil equilibrio de poderes, que pese a su fragilidad se mantiene desde hace más de 10.000 años, y se conoce como la Gran Convención, formada por tres vertientes. Al frente, se encuentra el Imperio, que aglutina todos los planetas y sus gobiernos, controlado por la Casa Corrino, y la cabeza de esta, quien es, a la sazón, el emperador. Este emperador gobierna como una especie de árbitro absoluto entre los diferentes poderes. El emperador, que en el tiempo del libro es Shaddam IV, gobierna desde el planeta Kaitain, donde se encuentra su palacio imperial (con su familia), sus órganos de gobierno, y el Trono del León Dorado. Aparte de Kaitain, el emperador posee otro planeta, que es la posesión ancestral de la Casa Corrino: Salusa Secundus. Este un terrible planeta prisión (donde son enviados los enemigos del Imperio), del cual nada sabe nadie fuera de los Corrino y sus aliados. 

    En segundo lugar, está el Landsraad, la aglutinación de todas las Grandes Casas, quienes a su vez, cada una gobierna un planeta (como mínimo, pueden gobernar mas) de forma absoluta (bajo los títulos de condes, duques, barones, etc.), y tienen bajo su mando Casas Menores. No se sabe cuántas Casas Mayores hay, pero son muchísimas. Por esta razón el emperador no puede hacer lo que le dé la gana, porque todas las Casas se lo comerían vivo. Pero la situación de constante sospecha entre Casas influye en que las conspiraciones contra el emperador no lleguen a nada, por si puedes acabar metido en una red del emperador o de otra Casa. El Landsraad es dirigido por el Alto Consejo, formado por las cabezas gobernantes de las Casas más poderosas (la Casa Corrino, con el emperador al frente, también tiene voto). Para controlar a estas Casas, el emperador posee un ejercito privado gigante, los Sardaukar, que son la potencia militar mas temida del Universo. Una fuerza de guerreros fanáticos entrenados y condicionados (mediante métodos secretos) desde la infancia para ser mortíferos y absolutamente leales al emperador. El temor de encontrarse de pronto con una invasión de Sardaukar sedientos de sangre en las puertas de su planeta es un disuasorio importante.

        En tercer lugar esta uno de los más misteriosos poderes del libro: la Cofradía. Esta misteriosa orden tiene el monopolio absoluto de los viajes espaciales y el transporte entre planetas, nadie, ni siquiera el emperador, puede viajar sin su permiso y su ayuda. Y es que de toda la humanidad, solo ellos atesoran los mapas del universo, las rutas, los mecanismos de viajes de larga distancia en el espacio,… Ellos son quienes mantienen unido al Imperio, y a la humanidad. Y por supuesto, cobran unas sustanciosas tarifas por ello. También controlan la banca interestelar. Quien osé desafiarles se verá condenado al ostracismo, la Cofradía simplemente cancelara todos sus derechos de viaje, por lo que esa casa quedara sin posibilidad de viajar o transportar cualquier cosa. Sin embargo nadie ha visto jamás a un navegante de la Cofradía, se mantienen bien ocultos en sus gigantescas naves, solo se ve a sus agentes. Por supuesto, sus pactos secretos con el emperador, contribuyen a mantener bien alejadas a las Casas de traicionar al Imperio: por ejemplo podrían trasladar un ejercito de Sardaukar hasta cualquier planeta que osara conspirar contra la Gran Convención. 

 


        En este contexto, que consta de un worldbuilding bastante complejo y con una primera lectura difícil (de ahí que me haya molestado en explicarlo) nuestro protagonista es el joven Paul Atreides, hijo del duque Leto Atreides, Casa Mayor gobernante del planeta Caladan. Sobre esta familia se cierne la sombra de sus enemigos más ancestrales: la Casa Harkonnen, gobernada por el terrible barón Vladimir Harkonnen, un GORDO mórbido y monstruoso, amante de la crueldad y hábil conspirador, quien amasa una de las mayores fortunas del Universo y gobierna varios planetas. El barón, supremo antagonista del libro desde el minuto 1, se las apaña para tender una trampa que los Atreides no pueden evitar: convence al emperador de que los Atreides se han vuelto demasiado peligrosos (el duque Leto estaba preparando un hábil ejercito y contaba con el apoyo y el respeto de muchas de las Casas, era probablemente el miembro mas respetado del Alto Consejo) y que lo mas sensato es eliminarlos, para lo cual se une a la conspiración de los Harkonnen. El emperador concede a los Atreides el feudo del planeta Arrakis, lo que les obliga a trasladarse.







        Este planeta, también llamado Dune, anteriormente gobernado por los Harkonnen, es conocido por ser el lugar más peligroso de todo el Universo, un gigantesco planeta desierto donde apenas hay vida y el agua lo es todo, habitado por unos terribles gusanos de arena que podían llegar a medir entre 450 y hasta 1000 metros de longitud, que se mueven bajo las arenas. Pese a ello también es el lugar donde se encuentra la sustancia más valiosa del Universo, la especia o melange, una sustancia que se encuentra en el desierto y cuya extracción es extremadamente peligrosa (debido a los gusanos) que sirve para potenciar los sentidos o las habilidades psíquicas, llegando a conceder una percepción extraordinaria (pagando el precio de la adicción).




        En este planeta el joven Paul verá como le es arrebatado todo aquello que más ama por las manos de los Harkonnen, su padre, sus amigos (casi todos), su familia, … incluso su título, su posición como noble, sus derechos. Toda su gente cae bajo la conspiración, y las tropas del duque son exterminadas por varias legiones de guerreros Sardaukar disfrazados de soldados Harkonnen enviados por el emperador. Despojado de todo, abandona el camino del Landsraad y se adentra en uno mucho más misterioso: el camino del desierto. Con la única compañía de su madre, la dama Jessica, únicos supervivientes de la carnicería desatada por sus enemigos, se adentra en las arenas para entregarse en brazos del pueblo Fremen, los habitantes autóctonos del planeta Arrakis, y la gente más dura y con mayor capacidad de supervivencia y combate del Universo. Un pueblo que recolecta el agua de sus muertos, que considera que llorar por un caído es el acto de mayor sacrificio posible, pues entregas agua al muerto. Un pueblo que vive bajo los rayos del mas abrasador sol, pero ocultos a los ojos del Imperio, y que en secreto están forjando un poder nuevo. Nuestro protagonista descubrirá que, como ya sospechaba su padre, una civilización que floreció y creció en semejantes condiciones (mas el acoso de los Harkonnen), en un planeta tan despiadado, se ha convertido en el ejercito mas poderoso y terrible del Universo, muy superiores a las legiones Sardaukar. Ellos acogerán al joven Paul como uno de los suyos, lo reconocerán como Fremen, y le confiaran todos sus secretos y artes. Del mismo modo, Paul está dispuesto a coger el material que supone este pueblo duro y despiadado y convertirlo en la espada perfecta con la que destruir a los Harkonnen, y también conceder a su nuevo pueblo el sueño que llevan milenios esperando. Los Fremen que lo han acogido concederán a Paul el nombre secreto de Usul, “la base del pilar”, aunque como pueblo, ellos le reconocerán como Lisan al-Gaib, “la voz del otro mundo” o “dador de agua”, quien les fue profetizado miles de años atrás, pues una profunda conexión anterior a su nacimiento une a Paul con este planeta, con sus gentes, y con su especia. Pero el Universo, la Historia, le conocerá como Muad’Dib. Y dejara una huella en toda la existencia conocida que nadie jamás olvidará.







jueves, 17 de diciembre de 2020

MARCIANO, VETE A CASA - FREDRIC BROWN

 





        Abro el blog con esta pequeña obrita de 1955 de Fredric Brown, autor que, de manera similar al maestro Lovecraft, en vida no logró demasiada importancia y escribía para vivir (sin lujos), publicando en revistas pulp. Su alcoholismo no fue de ayuda. Sin embargo, su obra se consideró posteriormente, y hasta el día de hoy, de culto dentro de la ciencia ficción; y ha sido citado como uno de los escritores más influyentes por autores de la talla de Philip K. Dick o Arthur C. Clarke. 

        Marciano, vete a casa hace gala de un fuerte sentido humorístico e irónico que se adentra incluso en el terreno de la metaliteratura y se ríe descaradamente de los clichés del genero. Brown nos presenta, con carta explicativa introductoria inclusive, la premisa de que, contra todo pronostico, los invasores extraterrestres que los autores de sci fi llevan décadas (aunque en este momento aún no tantas) imaginando, no son etéreas e incorpóreas inteligencias benignas, ni insectoides con exoesqueleto, ni seres planta del otro lado del Universo, son, simplemente, los marcianitos verdes típicos. Pequeños hombrecillos verdes de voz de pito venidos de Marte. A veces el cliché es la realidad, y justamente por ello, Brown demuestra que el cliché mismo es la opción menos cliché posible, porque nadie la habría cogido. 



        Con un método sencillo y una escritura muy simple, Brown no divaga acerca de como llegan ni de su tecnología, no le interesa. Un día PUF hay millones de marcianitos por la tierra y ya, ¿y a que se dedican? Pues a tocar las narices. Literalmente. Son trolls en miniatura. Su único interés es cotillear a los humanos (tienen rayos X en los ojos) y molestarles chillándoles en los oídos, revelando sus secretos a otras personas, y volviéndoles locos, ante lo que los humanos no pueden hacer nada, porque los invasores son intangibles. Básicamente así plantea el autor la novela, un mundo invadido de golpe y porrazo por una raza de pequeños seres intangibles cuyo único interés es hurgar cada aspecto de su vida y molestar, y va planteando diferentes situaciones que se van dando debido a esto, y como la humanidad se va adaptando. 

        Como hilo conductual y protagonista utiliza a un escritor, Luke Devereaux, que justo cuando sucede la llegada de los marcianos, el día 1, estaba atravesando un bloqueo creativo, y tras la situación generada por los maliciosos seres verdes, va apañándose como puede el pobre hombre. 

        Es una novela sencilla y cortita, no llega a las 200 paginas, y con estilo que se puede considerar precursor de algunos de los mas grandes, como Douglas Adams y su saga de Guía del autoestopista galáctico, muy bien escrita, y con un desenlace bastante... interesante. Casi de chiste académico. Muy agradable de leer. 

        Tiene película, estrenada en 1990 (¡casi 40 años después!), protagonizada por Randy Quaid, que se llama como el título original en inglés: Martians, Go Home






BALADA DE PÁJAROS CANTORES Y SERPIENTES - SUZANNE COLLINS

          Tras 10 años de parón, la autora de Los Juegos del Hambre ha sacado esta precuela de su saga: Balada de pájaros cantores y serpien...