jueves, 30 de junio de 2022

EL ARCANO Y EL JILGUERO - FERRAN VARELA



        Jodo, últimamente la fantasía española está que arde. Vaya librazos. En esta ocasión, con El Arcano y el jilguero, nos encontramos por vez primera en el territorio fantástico de Hann: una zona donde existen varios países gobernados desde unas ciudades-estado o ciudades libres, cada una con su propia cultura, religión, etc. Actualmente todo Hann está completamente asolada por una guerra brutal espoleada por el Imperio Leenero, una facción expansionista, militarista y belicista de este territorio. Desde hace varias generaciones, los crueles Emperadores del lugar se habían propuesto someter toda la civilización conocida, pero es el actual Emperador, el despiadado y megalómano Thied Seedveen, quien ha iniciado una campaña que está tomando el control de todo Hann a toda velocidad, sin detenerse ante nada, y sin mostrar misericordia.

        Esto no quiere decir que Sieedveen sea un asesino sin inteligencia, todo lo contrario, pese a que no le conocemos se nos muestra como un hábil tirano. Una vez arrasa los territorios implanta sistemáticamente la cultura Leenera, para exterminar todo rastro de identidad de las ciudades conquistadas, haciendo así definitiva la anexión. Un genocidio cultural en toda regla.



Poco mas o menos como imagino a Thied Seedveen. Un Emperador absoluto y tiránico recubierto de simbología divina y sagrada, que lo legitima. Elegido por los dioses para gobernar. By ChangYuanJou.  


        El Emperador se vale de seis grandes ejércitos con los que arrasa todo el continente, cada uno de ellos comandado por un General (el líder de uno los seis clanes patricios principales, las seis familias más poderosas), todos ellos militares de gran calibre. Son ejércitos extraordinariamente profesionales, cada uno especializado y equipado en un tipo de combate (naval, artillería pesada e incendiaría, infantería pesada y acorazada, etc.) y cada uno recibe el nombre de una criatura fantástica (el Gólem, el Hipocampo, el Basilisco, la Quimera, el Ziz y el Liche). Los gobernantes de cada ciudad anexionada se llaman Protectores, y también suelen ser miembros de uno de los seis clanes patricios. Finalmente, por encima de los Generales, están los cinco hombres que representan todo el poder del Emperador. Los cinco dedos de su terrible garra con la que está destruyendo todo aquello que se le opone, los cinco dedos que todo lo alcanzan: los Altos Oficiales. Knile la Sombra, Soreld la Espiral, Fura la Cicatriz, Zein la Cadena y nuestro protagonista, Mezen el Ariete. Estas cinco personas son casi plenipotenciarias, van donde se les antoja y hablan con la voz del Emperador, cinco personas especialistas en diferentes artes que los convierten en los cinco esbirros más útiles de Seedveen, muchos de ellos envueltos en historias y miedo, personajes temidos y semi-ocultos.

        Podría pensarse que estas cinco personas son las cinco más leales al Imperio, y puede que sea así con alguno de ellos, pero no con Mezen. Mezen se unió al Imperio para evitar un derramamiento de sangre, lo que en su dia le costó un altísimo precio... Y le obligo a cometer la mayor traición de su vida. Mezen el Ariete es un especialista en tortura física y psicológica, en investigación de debilidades (incluyendo las de ciudades enteras) y en su explotación, encargado de rendir sin apenas oposición las ciudades que se resisten y en obligar a arrodillarse a los más encarnizados enemigos del Emperador. La mayor parte del mundo cree que Mezen es en realidad un Arcano del Tormento, un demonio inmortal cuya tarea es la tortura y el dolor, que ha jurado lealtad a Seedveen por algún tipo de pacto oscuro. Fama que Mezen se encarga de fomentar con hábiles espectáculos, escenografías, y sus torturas públicas, y con su temible capa cosida, hecha de rostros humanos cosidos unos a otros. Ayudado por esta reputación, su sola presencia y unos pequeños empujones enfunden tal terror en rivales bien fortificados que rinden rápidamente las plazas.

 


Mezen con su capa de rostros, ilustración por Manuel Gutiérrez. Refleja a la perfección el rollo terrorífico y dramático, y al mismo tiempo melancólico y solitario, de Mezen. 


La victoria sabe a sangre y a enfermedad, a hambruna y a fuego. Su aliento arrastra el aroma de la ceniza y la muerte.

 

        Pero la realidad es que Mezen no siente ningún orgullo por lo que hace, es más, se castiga continuamente, y está convencido de que algún día habrá de rendir cuentas por sus crímenes (“quien a hierro mata…”). No es un creyente (en un universo cuasi-medieval, tenemos a un personaje ateo, sus reflexiones son muy interesantes), pero si lo fuera creería que el peor de los Infiernos y castigos se reserva para él. Lo tiene asumido, carga con ese dolor en soledad, con la única compañía de su caballo Susurro: un monstruo como él no puede tener amigos, no puede tener lazos, solo sirve para destruir y exterminar.

 

Porque eso es lo único que un Arcano del Tormento puede ofrecer: dolor, cenizas y muerte.

 

        Mezen es un hombre inteligente y hábil estudioso y conocedor de la política y la guerra, y como tal, sabe que el Imperio vencerá igualmente, con o sin él, es simplemente demasiado poderoso y numeroso. A él no le importa el Imperio, ni su gloria, ni siquiera le importa él mismo, ya no (a ese punto llega su castigo y autodesprecio). Sus crímenes y atrocidades tienen únicamente un fin: a cambio de la vida y el dolor de unos pocos, consigue rendiciones que salvan miles de vidas. Sin él, el final hubiera sido el mismo, pero con muchas más víctimas. Ha hecho tanto mal, ha pagado un precio tan alto (y ha obligado a incontables personas a pagarlo) que no puede detenerse ante nada en su objetivo: rendir todas las ciudades de Hann al Imperio Leenero, y una vez haya completado su tarea y no exista nada más que el propio Imperio, unificado y pacífico, sin más guerras, esperar a que el hijo de Thied Seedveen alcance la mayoría de edad. Una vez el joven pueda gobernar, Mezen asesinará al Emperador, y con eso su tiempo entre los vivos habrá concluido. Su deber concluido.

 

Llegará el día en que yo reclame tu vida, y saben los dioses que te haré pagar cada gota de sangre derramada.

 

        Pero en una de sus últimas campañas, las cosas comienzan a cambiar irremediablemente. Mezen comienza a acumular los rencores de algunos de los clanes patricios y de los Generales. Al mismo tiempo, Zein la Cadena (otro Alto Oficial, y personaje muy interesante) encarga a Mezen que investigue una extraña epidemia llamada el Azote que asola la ciudad de Usko, en donde Mezen descubre extrañas conspiraciones ligadas a la enfermedad. Pero el mazazo que cambiará su vida para siempre será salvar la vida y conocer a Nara, una joven chica huérfana y abandonada de una región recientemente arrasada por el ejército del Gólem, y la adoptará, en parte contra la voluntad del propio Mezen. Nara recordará a Mezen la humanidad que arde en su corazón, alejará de sí mismo su autoimagen como un monstruo, le ayudará a ver lo bello de la vida…y le entregará un lazo con el mundo de los vivos, una discípula y una hija. Alguien de quien preocuparse, algo de lo cual no se creía merecedor. Por primera vez, una vida que no está dispuesto a sacrificar. La historia de cómo esa chiquilla, ese jilguero, cambia la vida de este autoproclamado Arcano del Tormento, es la historia que este libro pretende contarnos.




Mas o menos así imagino a Mezen el Ariete cuando esta ejecutando sus trucos. Su apariencia maligna, siniestra, terrorífica, y al mismo tiempo sagrada. Inevitable.  

        El libro es una pasada, a caballo entre un tono romántico y trágico, doloroso: todo ese dolor que Mezen siente y vemos de primera mano (el libro es en primera persona, con Mezen); y un tono grimdark. No debemos olvidar que pese a su solitaria existencia cuasimonastica, Mezen no es ningún santo, es el antihéroe perfecto. Su objetivo es loable (la paz) pero para ello ha matado y torturado de formas indescriptibles a decenas, quizá cientos, de personas, y es culpable de la muerte de muchas mas. Su mano no ha temblado a la hora de segar vidas por el Imperio, y que cada vida le castigue no lo hace menos culpable. Una historia cínica, sádica, dolorosa, brutal, descarnada, violenta, plaga de muertes sin sentido ni gloria, personas destripadas, prostitución, miseria, pobreza, enfermedad, hambre. En este caso, el tono de ironía y cuasi-comedia que a veces utilizan otras obras de grimdark, como La Primera Ley de Joe Abercrombie y sus secuelas, es casi inexistente. Existe un tercer tono: el antropológico y cultural. El autor nos propone una descripción, casi una disección, extremadamente analítica y detallista de diversas de las culturas de Hann, desde la de los Leeneros, hasta la de otras regiones y ciudades como la de Usko, Tirvo, el Páramo Helado de Pur, etc.

        Mezen no solo es un torturador y un estratega nato. Es un hombre muy cultivado y estudioso en diversas artes, entre ellas, la historia y la antropología cultural. Conoce las leyendas de las ciudades de todo Hann, sus sistemas creencias, culturas, religiones, mitologías, etc. y las utiliza adecuadamente en su favor para alimentar su propia leyenda como Arcano del Tormento. En cada ciudad sabe de qué hilos tirar según la cultura del lugar. Aunque la que más usa, como hilo conductual, es la Leenera, ya que aparte de ser la del Imperio al que sirve, como es la que más se está extendiendo, es la más universal. De esta manera, nos habla (o le habla a Nara) sobre la historia de los Áureos, los dioses del Imperio, de sus Planos, etc. En El Arcano y el jilguero la mitología cobra un papel propio, y muy cargado, al tiempo que interesante. Su desarrollo e importancia concede a este Imperio de peso, de realidad, casi pareciera que existió de verdad.



Me imagino que ven a los Áureos como algo así. 

        El personaje de Mezen y su dolor están presentes en toda la obra, su proceso de castigarse, de aceptar su pasado, de aceptar a Nara, de resistirse a los sentimientos que están floreciendo en su interior, etc. Es doloroso casi hasta para nosotros. Las andanzas por la oscuridad de un genio que pudo ser mucho más. También mola muchísimo como desenrolla los hilos de ciertas conspiraciones, y que montajes (estilo Kvothe pero en plan sanguinario) urde para destruirlos, con su teatro y todo.

        La tragedia también es una constante en la novela, e incluso hay alguna escena que joder, me ha costado de verdad. Y mira que la veía venir, pero joder que dolor. Y qué bonito.

 

Esta es mi senda, la misma senda que he seguido los últimos dieciséis años, y pienso seguirla hasta el final.

 

        Y muchos preguntareis “vale, pero ¿y la magia?”. Pues no hay. Estamos en un mundo de fantasía, y de hecho hay razas fantásticas como lamias (terribles mujeres serpiente venenosas) de inteligencia escasa o reducida, pero que sepamos de momento no se ha hecho presente ningún tipo de magia, aunque Mezen (y algún otro personaje) tienen una batería de trucos que a veces lo parecen. Por ejemplo, Mezen también es boticario y medico de campaña (más o menos), y su conocimiento de las hierbas le lleva a saber prepararlas, concentrarlas, y aplicarlas adecuadamente para parecer que ha hecho magia. Ya se sabe, entre gente principalmente ignorante, un científico puede parecer un mago.

        Lo cierto es que el punto dramático (DRAMA QUEEN TOTAL) de Mezen, con su rollo de soy un monstruo, merezco el peor de los Infiernos, habré de rendir cuentas, etc. mezclado con su objetivo inamovible, y sus teatros de Arcano del Tormento a lo “Soy inevitable”, “Soy el Apocalipsis de Gotham”, me resultan cautivadores. Es una reina en realidad. Y es genial xD. Lo bien creado que esta todo el universo, Hann, las ciudades libres, el Imperio, etc. es una pasada, vaya trabajazo tiene este autor. Y todo condensado en 378 pags, y no sientes que le falte nada. Aprende Stephen King (The Stand, ejem ejem).

 

Una mujer con el honor suficiente para saldar su deuda con un demonio, la bondad necesaria para sentirse mal por ello, y la valentía para decírselo a la cara.

 

        Ahora bien: NO ES CONCLUSIVA. La obra acaba en un punto donde es necesario más libros, resolver la situación. Esperó que este autor le esté dando cera a este proyecto. De momento solo ha sacado, pocos meses después de publicar El Arcano y el jilguero, un pequeño librito (78 paginas) llamado Historias de Hann donde recopila unas cuentas historias ocurridas en Hann, pero no parecen guardar relación con lo ocurrido con Mezen y Nara. Además, en 2021 publicó la Guía de lectura de Ignotos Mayores, una especie de manual sobre la cartomancia de un tarot existente en una ciudad de Hann, y sobre sus deidades, que en vez de ser los Arcanos Mayores de nuestro tarot, se llaman Ignotos Mayores. Viene con las  cartas y todo.

        Y es que Ferran Varela, su autor, se trata de uno los autores más esquivos y oscuros del panorama nacional. No suele participar en grandes concentraciones de autores, no acude a grandes eventos, vive como muy a su bola. Nació en Barcelona en 1988, es licenciado en Derecho y ejerce la abogacía, y publica principalmente con Ediciones el Transbordador. En 2018 comenzó su carrera como escritor, con La danza del gohut (que no guarda relación con el mundo de Hann) y siguió en 2019 con El Arcano y el jilguero. Ha publicado algunos cuentos con editoriales como Pulpture.

        El libro de El Arcano y el jilguero, aparte de traer una historia cojonuda, interesante, oscura, intrigante, inteligente, distinta, y que merece mucho la pena leer, es una maravilla estética. Ilustrado por Manuel Gutiérrez, ilustrador de éxito, tiene una portada impresionante donde podemos ver a Mezen el Ariete con su capa de rostros, el Arcano del Tormento en todo su poder, y dentro del libro tenemos imágenes de rostros desollados y contorsionados por el dolor, un mapa detallado de Hann, además de un prólogo de Antonio Torrubia (conocido como “el librero del mal”, trabajador habitual de la librería y editorial Gigamesh) y postfacio de Daniel Garrido (creador del blog “El caballero del árbol sonriente”). Para traer tanto detalle, 26 euros y pico me parece barato.






        El ritmo es firme, la trama sólida y muy bien construida, el funcionamiento de la sociedad y del universo detallado. Los personajes están muy bien definidos y construidos, todos con claroscuros, algunos más ambiciosos, otros más buenos, algunos cubiertos por una coraza por el dolor que les han causado, etc. Incluso hay algún personaje LGTBI importante, que siempre mola. Aunque respecto a esto, las relaciones amorosas no tienen prácticamente ningún lugar en esta novela, únicamente puede observarse el cinismo con el que Mezen las contempla debido a un capítulo de su oscuro pasado. Si tuviera que sacarle algún fallo, sería solo la falta de declaraciones o concreción sobre si va a haber una continuación (me van rechinar los dientes como se quede así).

 

Esperaré a que toda Hann sea conquistada. Esperaré a que no sea necesario un ejército, a que no haya adversario contra el que el Imperio pueda luchar. Esperaré a que el hijo del Emperador tenga edad para gobernar, con tal de evitar una guerra civil en pos del Trono de Mesetatrigo. Y entonces os mataré. A ti y al Emperador.




martes, 14 de junio de 2022

EL IMPERIO FINAL - BRANDON SANDERSON



        Después de leer la fantástica Elantris (2005) tocaba seguir con el gigantesco universo del Cosmere, obra de Brandon Sanderson, y por lo que he leído, la mejor novela para hacerlo era El Imperio Final (2006), primer libro de la saga Nacidos de la bruma. En esta novela cambiamos totalmente de mundo y de rollo al que encontramos en Elantris, ya no estamos en el planeta Sel: la saga sucede en el planeta Scadrial. El sistema mágico, político, idiosincrático, etc. también es totalmente diferente. La característica principal de este ambiente es que al caer la noche una sempiterna niebla ocupa toda la tierra, y la mayor parte de los habitantes creen que es peligroso salir entre las brumas, ya que están habitadas por unos demonios. Además, una serie de cadenas volcánicas escupe continuamente toneladas de ceniza en el ambiente, que no para de llover sobre el continente, manchando de gris las ciudades y cosechas. La otra característica es que posee un sistema mágico basado en metales, llamado Alomancia.

        Nos encontramos en un gigantesco continente que compone la práctica totalidad del mundo conocido (o al menos del que tenemos conocimiento nosotros, como lectores, en este primer libro), y todo él está controlado por un gigantesco sistema imperial, una nación unificada y uniforme llamada el Imperio Final. Se formó hace más de 1.000 años cuando su creador y actual gobernante (un inmortal) conquistó a todos los pueblos, un ser conocido como el Lord Legislador. Los eventos de entonces están envueltos en la leyenda, conformando una verdadera religión política entorno a él mismo, pero se dice que el Lord Legislador salvó al mundo de una catástrofe global orquestada por una entidad rival, la Profundidad. Desde entonces es el gobernante absoluto de toda la civilización, y nadie conoce exactamente el secreto de su inmortalidad, su invulnerabilidad (se dice que es indestructible) o de su poder total.

        La nación recibe el nombre del Imperio Final porque dicen que es la última nación que gobernará y que lo abarca todo, el último imperio y el eterno, el definitivo, siempre bajó el control del mismo gobernante absoluto. Nos encontramos con un interesante mundo uniforme, donde nada se diferencia, solo existe un sistema, una cultura: la que el Lord Legislador diseñó e impuso. Y durante los últimos 1.000 años él, sus tropas, y sus criaturas, se han dedicado a exterminar sistemáticamente todo rastro de cualquier otra cultura o religión. Es un mundo sin fe, ya que la única que existe es la religión del Lord Legislador, manipulada y extendida por sus agentes y por él mismo, y en general es asumida (incluyendo por los funcionarios del Imperio Final) como una religión política.



El Lord Legislador, fanart por Alex Flagg.


El Lord Legislador es la Lasca del Infinito. Es un pedazo del mismo Dios. No se le puede matar.

        Este imperio está separado en Dominios repartidos por todo su territorio, y dirigido desde la capital imperial de Luthadel (en el Dominio Central), y dividido en dos castas principales: los nobles y los skaa. Los skaa componen la inmensa mayoría de la población, y son gobernados por la nobleza (quienes se dice que son las familias descendientes de aquellos que apoyaron al Legislador durante su Ascensión). Por todos los Dominios hay cantidad de plantaciones cosechadas por skaa, que alimentan al imperio, y que son regentadas por nobles rurales, conformándose así una pirámide de nobleza que termina con las familias nobles principales que dirigen todo desde sus fortalezas en Luthadel. Los skaa son tratados como escoria, esclavos sin derechos, y así ha sido desde hace un milenio, al nivel de que la mayoría tienen ya asumido su posición, están domesticados, dormidos, ni se plantean una rebelión. Además, solo entre aquellos de sangre noble surgen los poderes alománticos: la mayoría controlan un solo metal (cada uno concede un poder determinado, como mayor fuerza, o empujarse o atraerse), y algunos controlan todos, los llamados nacidos de la bruma, los soldados más temibles de la nobleza. Los skaa se creen incapaces de oponerse a esto.

        Para controlar a los poderosos nobles existe una rígida burocracia, llamada el Ministerio del Acero, que rinde cuentas en última instancia ante el Legislador, compuesta por unos funcionarios llamados obligadores. Cualquier tipo de transacción, matrimonio, pacto o alianza pasa por ellos (si es de más nivel, suelen estar bajo la autoridad de un obligador de mayor categoría). Entre el máximo nivel de estos funcionarios se encuentran los Inquisidores de Acero, unas criaturas creadas en las profundidades de Kredik Shaw, el palacio del Legislador, no se sabe con qué oscuras artes, con clavos por ojos, y que parecen invulnerables y todopoderosas. La temible policía secreta del Imperio Final, que persiguen a sus presas de forma implacable. Nadie sabe de alguien que haya vencido a uno de estos seres. Molan un montonazo.



Un Inquisidor de Acero, fanart por Jake (i_spilt_my_paints).



Inquisidor de Acero, fanart por Simon de Payrebrune.



Inquisidores de Acero, fanart por Sebastien Convert (@stenvar_mistwalker).


        Tenemos por protagonista a Vin, una ladronzuela skaa de Luthadel que pertenece a una banda de la peor calaña y parece presentar una fuerte capacidad alomántica. Es recogida por una banda de ladrones skaa de alto nivel, la elite de la elite del mundo criminal, tanto que conocen a la perfección la alta sociedad y saben hacerse pasar por nobles. La mayoría de ellos son alománticos de increíbles capacidades (frutos de cruces entre skaas y nobles, su nacimiento está prohibido pero a veces ocurre), y están dirigidos por el misterioso Kelsier, el Superviviente de Hathsin, el único skaa nacido de la bruma conocido. Una verdadera leyenda en el mundo del crimen.


Se acercan nuevos tiempos. Sobrevive un poco mas y puede que veas grandes acontecimientos en el Imperio Final. 


        Kelsier introduce a su banda, incluyendo a la joven Vin, en un nuevo golpe, pero este es diferente. Tiene por objetivo derrumbar el Imperio Final, robando al Lord Legislador el control de la nobleza y de su burocracia, y de la misma Luthadel. Todo aliándose con la débil y poco fructuosa rebelión skaa. Es brutal, hay una escena literal a lo Ocean’s Eleven, con pizarra y todo, donde toda la banda se reúne, con Kelsier al frente, para diseñar el plan, mientras van sacando los diferentes sub-planes para concluir en el objetivo final, cada uno encargándose de una determinada parte. Kelsier, como un auténtico Danny Ocean, controla y supervisa todo el mecanismo, y hay engranajes de su plan que tan solo él mismo conoce. Kelsier está planeando algo más grande que un simple alzamiento, su objetivo es más profundo que cualquier cosa que imagine el resto de su banda.

        Hay muchísimo que deben resolver, el Imperio Final es extremadamente solido, la burocracia de los obligadores es casi impenetrable y muy hermética, aprovecharse de las grietas del sistema no será sencillo. Ni siquiera tienen la suficiente información, hay demasiado que desconocen del sistema, secretos militares de estado. Por no saber, no saben ni que narices son los Inquisidores de Acero o como se les mata. Tampoco saben que es el Lord Legislador, hay quien dice que solo es un alomántico extremadamente poderoso, otros que es un dios viviente. 


Nuestra fe es a menudo más fuerte cuando debería ser más débil. Ésa es la naturaleza de la esperanza.


        Kelsier se plantea como una suerte de Conde de Montecristo: en el pasado el Legislador le arrebató prácticamente todo lo que tenía, aquello que más amaba. Ahora, pese a todo el carisma y la personalidad irónica y encantadora que le envuelve (a veces incluso gracioso y cachondo), se ha convertido en un personaje vengador, un cínico. Al igual que Danny Ocean con su archienemigo Terry Benedict, en parte todo su plan no es más que un intento de acabar con su némesis. No puede detenerse ante nada en su objetivo de destruir al Legislador y a su imperio, pero al mismo tiempo esta atormentado por los sacrificios que se ve obligado a hacer. Precisamente por esto, su deseo también es conceder a los skaa un nuevo comienzo, puede que él busque su venganza, pero al mismo tiempo desea que los skaa sean liberados y planea conseguirlo al precio que sea.


Represento a aquello que nunca has podido matar, no importa cuanto lo hayas intentado. Yo soy la esperanza. 



Kelsier, fanart por autor desconocido.

        Vin, como nueva discípula de Kelsier, va descubriendo los entresijos de este enigmático personaje y un imperio gigantesco cuyo complejo mecanismo ahora comienza a entender. Su parte en el plan será infiltrarse en la sociedad de la alta nobleza, haciéndose pasar por la sobrina lejana de un noble recién llegado, y va introduciéndose en el mundo de las fiestas de sociedad. Poco a poco va aprendiendo a mezclarse con los nobles, a ser una de ellos, y a escuchar, sacando la información suficiente para que el plan germine. Pero mientras esto sucede, Vin va descubriendo que entre los nobles no solo hay monstruos violadores, y sádicos maltratadores de skaa. También hay personas decentes que solo apartan la mirada ante el sufrimiento de su pueblo, porque ni siquiera los nobles pueden intervenir en las leyes y el sistema de castas impuesto por el Lord Legislador. Incluso algunos tratan de cambiar las cosas. La rebelión implica en un momento dado el exterminio de los nobles, pero ella comienza a dudar de la moralidad de ese objetivo, ¿y si en su afán por lograr su objetivo se han convertido en los mismos monstruos que intentan eliminar? ¿Se han convertido en un grupo de fanáticos?


El miedo es la herramienta de los tiranos. Por desgracia, cuando el destino del mundo está en juego, usas las herramientas que tienes a mano.


        Sanderson trata de este modo múltiples temas de fuerte interés: una sociedad unificada y cuya historia ha sido borrada. Múltiples culturas eliminadas. Un pueblo oprimido y una minoría gobernante, ¿Cuál es la moralidad de esta minoría? ¿Son obligados, solo recibían órdenes como sostenían los nazis de Núremberg, o podían hacer algo? ¿Cuál es la moralidad de una rebelión, hasta donde se puede decir “era necesario”? ¿Es lícito un exterminio? Mientras descubrimos la historia del Legislador, es posible que comencemos a ver que a lo mejor él también hizo en su momento lo que pudo. A veces no encontramos la forma de detenernos. ¿Que es exactamente la verdad? La naturaleza original de las leyendas antiguas y olvidadas es exactamente otro de los misterios con los que juega el libro.


El Héroe de las Eras no será un hombre, sino una fuerza. Ninguna nación lo reclamará, ninguna mujer lo conservará y ningún rey podrá matarlo. No pertenecerá a nadie, ni siquiera a sí mismo.


        Los protagonistas se irán encontrando diferentes problemas, introducirse en el juego de poderes e intrigas internas que recubren la sociedad de los nobles, su partida por hacerse con la economía. Deberán asegurarse de mantenerse lo más lejos posible de la atenta mirada del Legislador, evitar a los temibles Inquisidores de Acero, que buscan a Vin y a Kelsier de forma incansable. Han entrado en una apuesta con pocas posibilidades de victoria, pero deben intentarlo.





Vin, vestida para matar, en la ciudad de Luthadel de fondo, fanarts por autor desconocido. 

        La novela cuenta con unos paisajes impresionantes. La ciudad de Luthadel es una megalopolis habitada por miles de skaa afincados en suburbios de una pobreza desoladora, trabajando como bestias en las fabricas de la nobleza, en unas condiciones infrahumanas. Otros viven criminalizados en un ambiente brutal donde se ven obligados a luchar para sobrevivir, mientras los obligadores les dan caza. Por otro lado, están las zonas ricas de la ciudad, todo fasto y apariencia, con los poderosos nobles en lo alto de la cadena, destacando las fortalezas de las familias principales. Finalmente, Kredik Shaw, el temible palacio de incontables agujas de imposible altura, una especie de Sagrada Familia maligna, donde habitan los Inquisidores de Acero y el Lord Legislador. El centro del todo el Imperio Final. Y esta ciudad podrida y fastuosa al mismo tiempo, con ese palacio tenebroso en el centro, por las noches se puebla por completo de esa impenetrable niebla siniestra, y continuamente esta manchada de una capa de ceniza. Un ambiente continuamente gris y siniestro. 

        La trama es narrada como un anime, utilizando un ágil ritmo que combina política, intrigas, plot twist, y combates. Es un sistema de poderes muy bien utilizado, con luchas entre alománticos, nacidos de la bruma, Inquisidores, y otro tipo de figuras poderosas. Otros poderes que entran en el juego. Y en lo mas alto, un final boss imbatible, un Señor Oscuro definitivo, el Lord Legislador. Las luchas son tremendamente activas, estilo anime shonen: cada alomántico debe consumir su metal y quemarlo en su interior (los nacidos de la bruma pueden hacerlo con los ocho metales alománticos), y el abanico de habilidades les ofrece especialidades variadas, destacando el hierro y el acero. Estos poderes alománticos permiten atraer o tirar de las fuentes de metal, permitiendo mover objetos utilizándolos como proyectiles, o moverte a ti mismo si el objeto pesa mas (o esta anclado o en el suelo), ya sea empujando o atrayendo.  



Luthadel, fanart por Raul Rossell.


Luthadel, con dos nacidos de la bruma saltando entre edificios, fanart por Ricky Ho.



Vin observando el Kredik Shaw. Fanart por autor desconocido.


        Es una novela con muchos misterios por resolver, y como una primera parte, no podemos esperar acabarla con todas las respuestas. De hecho, en cierta manera al acabarla tenemos más preguntas que respuestas, se nos abren muchas intrigas. Nacidos de la bruma forma parte del Cosmere, así que de alguna manera está conectado a Elantris, aunque eso aún no se ve (excepto por un personaje concreto). La saga continua en otras 5 novelas que recorren varias eras, y aún quedan por publicarse unas cuantas solo de esta saga (que por lo que sé Sanderson va conectando poco a poco en el sistema del Cosmere, al resto, como la saga de El Archivo de las Tormentas). Además de las obras más cortas adicionales recopiladas en el Arcanum ilimitado.

        La edición, publicada por Nova, es una maravilla. Una edición especial ilustrada, con una portada en letras doradas muy currada, y contiene un mapa a color del Imperio Final, otro de la ciudad de Luthadel, así como una tabla de metales alománticos (a color también), un glosario de términos alománticos,… Mas las curradas ilustraciones de momentos espectaculares de la saga. En esta misma edición esta la segunda y tercera parte de la saga. Es cara pero merece la pena. Además, también existen ediciones en tapa blanca, en tapa dura,….






Portada del libro, mapas, y tabla de metales alománticos. 


        Es una novela super entretenida, activa, con bastantes reflexiones (destacan las reflexiones de Sanderson acerca de las religiones, tema que creo que le encanta) personajes muy interesantes, un montón de historia y worldbuilding detrás, etc. Muy recomendable, yo me la fundí en 4 o 5 días y son 670 páginas.

        Ha tenido un considerable impacto en el mundo de la literatura de fantasía, influyendo a autores como Brent Weeks (uno de mis favoritos) en su maravillosa saga El Ángel de la Noche. El personaje de Durzo Blint esta inspiradísimo en Kelsier; Kylar, prota de la saga de Weeks, como Vin, debe introducirse en el mundo de los nobles haciéndose pasar por uno de ellos, etc.  



viernes, 10 de junio de 2022

LUNA SANGRIENTA - RAMSEY CAMPBELL

        


        La verdad es que me encanta leer a Ramsey Campbell. Tiene algo como especial en lo que hace, algo puro. Hace unas semanas terminé Luna sangrienta (1986), y una vez más puedo decir que es rara, terrorífica, y…impresionantemente ambiental.

        Al igual que el resto de los libros suyos que he leído, se inscribe dentro de la rara tradición del quiet horror (“horror silencioso”), un poco conocido sub-genero del terror caracterizado por carecer de grandes matanzas, carnicerías inmisericordes, o escenas gore. Ni siquiera hay una abundancia de escenas de monstruos (aunque en esta hay alguna). Como ya desarrollé en la reseña de otra novela del autor, El sol de medianoche (1990), generalmente es todo pura ambientalidad, el autor trata de ofrecernos un ambiente aterrador pero no por lo que vemos, si no por lo que sentimos o no vemos. Detalles que se van sumando, formando una verdadera atmosfera. Un sonido, una sombra, un temor que va cobrando forma. No es muy animado, pero extrañamente estético y efectivo. Y Campbell es uno de los mejores en lo suyo.

        Ramsey Campbell es un autor británico de terror, nacido en 1946, especializado en este sub-genero, y fuertemente influenciado por Lovecraft (tiene antologías lovecraftianas), así como por Arthur Machen y por Algernon Blackwood. Estos autores pueden observarse fácilmente en la mayoría de sus libros.

        Luna sangrienta tiene como escenario principal a Moonwell, una pequeñita y aislada población inglesa, creo que por la zona de los Peaks. A nadie le importa Moonwell, nadie la visita, y su escasa población tampoco tiene mucho interés en recibir muchos forasteros, viven a gusto con su cómodo aislamiento. En ciertos aspectos Moonwell es una comunidad atrasada, que se niega a recibir los avances y las supuestas mejoras de lo que ellos llaman “esos urbanitas, gentes de ciudad”. Buena parte de la población son, hablando mal, un hatajo de paletos religiosos (o simplemente paletos), y aun sobrevive un fuerte racismo, machismo y homofobia entre otras cosas (intolerancias que Campbell se encarga de criticar). Junto a esa religiosidad cristiana (que tiene su gracia, porque el párroco oficial cuando comienza la novela es un hombre muy tolerante y majete, que huye de la religión reaccionaria) perviven una serie de tradiciones paganas tipo celta.



        Estas tradiciones celtas se articulan en torno al Foso de la Luna, una profunda sima cercana al pueblo, que por lo que sabemos nunca se ha explorado. Esta sima fue, hasta la llegada de la cristianización, objeto de cultos rituales y adoración por parte de las culturas druídicas de la zona: se dice que un antiguo dios lunar maligno fue encerrado en ella. Esas tradiciones perviven hoy en día en forma de festividades: por ejemplo, decorar con flores el murete que rodea al foso, y sus leyendas siguen poblando el valle, así como las de la criatura que allí mora, y que ahora se conoce como Harry el Lunático (Harry Moon).

 




Los romanos destruyeron a conciencia todo el culto druídico, porque deseaban que ese lugar fuera olvidado. Sabían que había un ser viviente allí abajo, y que ese ser podía ejercer su dominio sobre cuentas personas vivieran en los aledaños.

 

        El libro tiene diversos protagonistas, y vemos todo lo ocurrido desde la perspectiva de algunos de ellos. Geraldine Booth, una librera forastera que establece su negocio junto a su esposo en el pueblo, y que es víctima de los malos tratos a los forasteros. Craig, un hombre anciano de un pueblo vecino que junto a su esposa visita en Moonwell a su hija Hazel, quien vive allí junto a su esposo, y que no aprueban mucho el ambiente del lugar ni al esposo de su hija. Nick Reid, un periodista que llega al pueblo de casualidad e inicia una amistad y algo más, con Diana, otra de las protas, una profesora y educadora infantil estadounidense, con una importante formación en su campo que de poco le vale en ese ambiente recargado, pero que lucha con ahínco por ayudar a los niños mientras trabaja como maestra en la escuela local. Eustace, el cartero de la zona, un hombre tímido e introvertido pero con una curiosa habilidad para la comedia cuando se sube al escenario, y que como los anteriores, no está contento con el atraso del pueblo. Finalmente, Brian Bevan, un padre de familia que tras un cambio repentino se convierte en un religioso y creyente reconvertido de fuerte fanatismo, pero con un secreto que lo atormenta día y noche, royéndole el cuerpo y la mente, y su hijo Andrew, un niño aislado y marginado con problemas para relacionarse y expresarse, que ve como todo su mundo se viene abajo.

        Las luchas de la mayoría de los protagonistas por adaptarse a ese ambiente tan retrogrado (“lo que necesita esa chica es un hombre que le enseñe unas cuantas cosas”, ese es el nivel de los comentarios) y luchar contra él cambian cuando llega al pueblo Godwin Mann, un predicador californiano evangelista y extremista religioso, acompañado de un verdadero ejercito de fieles y creyentes. Estos fieles lo han seguido por todo el país, algunos desde California, son una especie de grupo de hippies fundamentalistas cristianos evangélicos, sin ningún tipo de tolerancia (“las niñas no han de querer a las de su sexo, ni los niños tampoco”, “estandarte de Dios en la cruzada contra el comunismo”, etc.), de una repelencia que cuesta expresar. Los peores son los críos que llevan con ellos, madre mía que criaturas más repelentes.

 

Piensa que ha sido elegido como paladín de Dios. Esta intoxicado por la fe, y son las asambleas las que le exaltan.

 

        La campaña de predicación de Godwin Mann empieza a ganar adeptos gracias a su fuerte personalidad y carisma, al aislacionismo del pueblo, a la presión que ejerce hábilmente con su creciente grupo de adoradores sobre los que se le resisten, etc. Poco a poco se hace con el control del pueblo, y mientras lo hace, va destruyendo todos los restos de la tradición druídica, sin mostrar ningún tipo de temor o respeto por las leyendas originales. El plan oficial de Godwin es bajar a la sima y demostrar así que no existe nada allí, que el único poder real es Dios, sin ser consciente del terrible mal que puede despertar. Quizá las leyendas estaban para algo.

 

Su intención era resucitar lo que había en la cueva, hasta que se dieron cuenta de que era lo que iban a reanimar.

 

        Diana, la principal de los protas, mientras lucha contra el creciente fanatismo (un verdadero ambiente policial, real), se va dando cuenta que puede que Godwin este arrastrando a toda la población a un destino muchísimo peor con sus sueños de gloria religiosa y mesiánica. En sus conversaciones con algunos viejos sabios que aún recuerdan parte de la tradición original, descubre que Harry Moon puede no ser una simple leyenda, sino un mal primordial, una criatura antigua ligada a la Luna que lleva siglos esperando para retornar al mundo y vengarse de la humanidad que lo encerró. Y solo ella lo ve venir, solo ella puede detener al psicotizado evangelista (que esta como una jodida maraca, en serio).



        Todo esto ocurre en ese ambiente de pueblo aislado donde no paramos de ver simbologías celtas (la misma iglesia está construida sobre un templo celta), lo que añade mucho rollo a la obra. Como de un pasado lejano que nos observa desde su celda, esperando a salir.



Los druidas juzgaron este sitio idóneo para llamar a un dios que no era un dios, sino un monstruo.  

 

        En esta obra, por un lado Campbell nos expone su visión política y social contra la intransigencia y el atraso, a través de todo ese combate contra el atraso preexistente en Moonwell, más todo el ambiente de fanatismo e incluso de histeria religiosa que se forma con la llegada de Mann y sus discípulos. Mann es un manipulador y un fanático despiadado, con unos aires de grandeza y una megalomanía de categoría clínica, de una intolerancia verdaderamente peligrosa. Un sujeto agitador cuyos discursos y campañas pueden provocar víctimas mortales y hacer caer en el mismo fanatismo a jóvenes impresionables. Un adoctrinador. El autor también avisa contra el peligro que suponen este tipo de personas, que en EE.UU son bastante comunes.

 

Te explicaré donde radica la aberración de esa misericordia vuestra: en que sofoca los sentimientos que habríais de tener para ser honestos con vosotros mismos.

 

        Por otro lado tenemos la novela de terror: es una novela donde podemos observar muchísimo sobretodo de Arthur Machen. El ambiente campestre y aislado, toda esa mitología celta, etc. es absolutamente Machen. En este sentido y en otros (una divinidad antigua, un paraje aislado) guarda unos cuantos parecidos con El sol de medianoche del mismo autor. Al igual que este libro, también tiene una inspiración lovecraftiana, la criatura de la cueva es muy horror cósmico, muy Lovecraft. Podía ser un Primordial tranquilamente. Por otro lado es una novela que guarda una fuerte similitud con It de Stephen King, y no descarto que hubiera una fuerte retroalimentación entre los dos autores o que un libro inspirará al otro, porque ambas novelas son de 1986. Las criaturas de ambos libros son muy similares, e incluso se las combate de métodos parecidos. Aunque he de decir que me gustó mucho más It, y eso que no soy incondicional de King, al revés, hay muchas obras suyas que no me han dicho nada, pero esa me flipó.



Portada de una edición anglosajona de The Hungry Moon / Luna sangrienta.


        Como la mayoría de libros de Campbell, es muy bueno y además muy puro. Podía haber hecho una historia más comercial, pero él tiene su forma de escribir particular y la mantiene, muy ambiental y metafórica. Pero también, como la mayoría de sus obras, a veces es compleja de entender, las metáforas son tan rebuscadas que te cuesta entender que trata de transmitir el autor, y tienes que leer varias veces los mismos párrafos. A ratos es hasta pesada.

 

Lo que hay en la cueva es más viejo que el mismísimo Satán, eso te lo garantizo. Es lo que espantaba a los cavernícolas en la antigüedad, y lo que si Mann lo resucita, nos transformara a nosotros de nuevo en seres de las cavernas, nos tendrá justo como él quiere.  

 

        Por otro lado, algunos de los personajes sobran un poco, el matrimonio de viejecitos y el de los libreros no llegan a hacer nada en realidad, no van a ningún lado realmente.

        Pero en general es una buena novela que merece la pena leer, un terror distinto, más agobiante. Y es que es increíble como Campbell logra transmitir esas sensaciones de agobio creciente, conforme avanza la novela y la liberación del ser del foso se avecina. Es muy notable como Campbell aporta diferentes matices al agobio, como logra metértelo en el cuerpo, y como focaliza la mayoría de esos agobios y esas sensaciones sobre la misma Luna. La Luna vertebra toda la obra, su presencia es contante, siempre acechando desde arriba, y al mismo tiempo desde abajo, desde el foso. No es la que más me ha gustado de Campbell, mi favorita suya ahora mismo es Imágenes malditas y después El sol de medianoche, pero es muy chula. Es una novela oscura, densa e inquietante, entretenida, donde te sientes parte de la trama, notas como la oscuridad te rodea a ti, como la Luna que tienes encima en las noches que estás leyendo este libro es a ti a quien observa. Muy muy chunga.



        Finalmente, he de añadir que la traducción, Luna sangrienta, es algo deficiente, teniendo en cuenta que el titulo original es The Hungry Moon, o sea, “Luna hambrienta” o “La Luna hambrienta”, que tiene mucho más sentido en el contexto de la obra. Pero bueno, no es la peor traducción de un título que he visto. El libro está actualmente descatalogado en España, pero no es difícil conseguirlo en la venta de segunda mano (todocoleccion, iberlibro, wallapop, los de siempre), hay un par o tres ediciones circulando. La portada es un poco cutre, una luna ahí colgando con un rayajo de sangre metido con el Paint, pero bueno xD. Son ediciones viejas de libros baratos, hay que contextualizar.

 

La cueva no era un recinto sagrado, ni tampoco estaba muerta.

 



lunes, 6 de junio de 2022

LOS LIBROS DE TERRAMAR - URSULA K. LE GUIN

      



1. Un mago de Terramar (1968).
2. Las tumbas de Atuan (1971). 
3. La costa mas lejana (1972).
4. Tehanu (1990).
5. Cuentos de Terramar (2001).
6. En el otro viento (2001). 

        Una de las sagas más aclamadas, conocidas y al mismo tiempo reflexionadas de la historia de la fantasía, podríamos llamarla la reversión de El Señor de los Anillos, es Los libros de Terramar, escrito por Ursula K. Le Guin. Una importante escritora de ciencia ficción y fantasía, así como pensadora y yo la llamaría filosofa feminista. Una verdadera titánide al nivel de otros grandes como Terry Pratchett. En muchísimos aspectos, en lo que a fantasía y narrativa se refiere, caminamos por los senderos que ella trazó.

        La saga se ubica en la tierra mítica de Terramar (en inglés, “Earthsea”), un territorio tipo archipiélago, formado por un grupo de islas reunidas alrededor de la isla más grande: Havnor (de tamaño similar a Gran Bretaña), donde está también la más grande de las ciudades, del mismo nombre. Existen muchas más islas alrededor, cada vez más alejadas, hasta alcanzar unos territorios llamados Confines, uno por punto cardinal: Confín Septentrional, Confín de Levante, Confín Austral y Confín de Poniente. Estos territorios lejanos funcionan un poco a su bola, sus costumbres son algo distintas, etc. La mayor parte de los habitantes de estos territorios son de raza oscura, en unos territorios son más morenos, y en otros de tez más clara, pero siempre de tono marrón. Finalmente, existen unas islas totalmente alejadas del archipiélago, llamadas las Tierras de Kargard, con costumbres y sistemas absolutamente distintos (un poco tipo vikingos), habitadas por personas piel blanca, pálida.



Mapa de Terramar.

        Terramar está habitada por unas sociedades (una por isla) en general bastante interrelacionadas entre ellas (menos los kargos que van por libre), alfabetizadas (conocen la escritura y no es raro saber leer y escribir, aunque tampoco común en las zonas más rurales) y no industriales. Hay una cultura monetaria muy básica. En general están aún anclados en una temprana Edad del Hierro, y en muchos lugares donde el hierro es escaso, es normal que utilicen el bronce. Con esta mayoría de población negra, y esta cultura del hierro temprana, Le Guin trataba de criticar la suposición general de que las obras de fantasía debían tener una mayoría de población blanca, y ubicarse en una Edad Media.

        Terramar en el pasado tuvo una monarquía bastante ideal (menos los kargos, por libre) con sede en Havnor, que nacía de una larga línea de reyes conectados a una saga mítica y de leyenda, y de ahí hasta la creación (una creación que al igual que en El Señor de los Anillos comenzó con una canción, con Segoy como el Creador). Fue truncada cuando el rey Maharion y el mago legendario a su servicio Erreth-Akbé murieron, y el Anillo de Erreth-Akbé, donde estaba grabada la Runa de la Paz, se partió. Una mitad cayó en la terrible oscuridad sin nombre de las profundidades de las Tumbas de Atuan, la otra mitad se perdió.


Heredará mi trono quien haya cruzado la tierra oscura con vida y regrese a las lejanas costas del día.


        Nadie fue capaz de gobernar Terramar desde entonces, y se inició una sangrienta y anárquica etapa de luchas de poder entre diferentes príncipes, reyezuelos y señores, que terminó cuando desde Roke, la Isla de los Sabios, el centro de la magia y de su enseñanza, los magos tomaron el control del archipiélago. El Archimago de Roke asumió el papel de la regencia, ejerciendo como árbitro y máxima autoridad entre los distintos poderes políticos de Terramar, hasta que alguien logrará ser nuevamente digno del trono de Havnor (lo que no ocurrirá seguramente hasta que el Anillo sea unido de nuevo, y devuelto a Havnor). Y desde entonces han pasado cientos de años, los Archimagos se suceden y ningún rey ha sido declarado.



Havnor. O así la imagino, mas o menos.

        En cuanto a los kargos, viven en una suerte de imperio fanático, oscurantista y aislacionista (no se relacionan con ningún otro territorio, más que para intentar saquearlo). La magia está prohibida, perseguida y condenada con la muerte. Todo el imperio está gobernado por un Rey Dios a quien se le rinde adoración incondicional. Por debajo del rey, están los sacerdotes, es un imperio sacerdotal.

        Existen una última facción: los dragones. Los dragones son unos seres inteligentes y poderosos, grandes como montañas, viven cientos o hasta miles de años, sus escamas son duras como el acero, y además hablan la Lengua Antigua, la lengua de la magia, la Lengua de la Creación, con naturalidad. Su magia es muy poderosa. Es la lengua con la que Segoy creo el mundo, y ellos la utilizan como nosotros nuestro lenguaje mundano. Generalmente no se inmiscuyen con los humanos, viven a su bola, en un extremo, e incluso a veces mantienen relaciones amistosas, pero a veces también atacan islas.




El dragón Yevaud.

        La magia de estos libros no funciona por estrictas reglas como la de Harry Potter, son poderes que nosotros apenas alcanzamos a entender. Invocaciones, transformaciones, etc. A través de la Lengua Antigua se puede alterar la forma de las cosas, doblegar la realidad, pero debe hacerse con sabiduría, o puede alterarse el equilibrio (esta es una constante en estos libros, el tema del equilibrio y de la sabiduría a la hora de usar la magia). Con el nombre de la roca, puedes controlar la roca, pero tienes que conocer el nombre de esa roca en concreto, e implica algo más de memoria. De esta manera, puedes incluso conocer el nombre de seres vivos (personas, incluso dragones) y doblegarlas a tu voluntad. Pero para ello se debe usar tu nombre verdadero, no el que se usa para dirigirte a ti coloquialmente, y ese nombre solo es conocido por aquellos a quienes más confíes.

        Me molesto en explicar todo esto porque la autora en un principio no pretendía más que sacar el primer libro, una novela y ya, pero más adelante fue ampliando ese mundo, y añadiendo facciones, historias, leyendas, etc. Y el mundo se hizo más complejo. Así que al empezar con el uno, a veces cuesta entender que está pasando, en algo que luego se ampliará. Toda esta información no se da de forma cohesionada, si no que Le Guin te suelta píldoras en distintos momentos y tu tienes que unirlas, y a veces es difícil acordarte de la capsula de información que en la escala cronológica se sitúa antes que la que acabas de leer. Te puedes liar. 

        En este contexto comienza el primero de los libros: Un mago de Terramar, que se sacó en 1968 (¡54 años ya!). Nuestro protagonista es Gavilán, un joven aprendiz de mago de la montañosa, rural y agreste isla de Gont. Gavilán (cuyo nombre verdadero es Ged) es un joven bueno y amable, pero consumido por sus deseos de ambición, poder, conocimiento,… Sus deseos son altruistas, pero quiere aprender mucho y muy rápido, es poco paciente. Su maestro de Gont, el poderoso mago Ogion, le envía a la isla de Roke, donde aprenderá bajo la enseñanza de los maestros. Este joven, destinado a convertirse en un mago formidable, despierta a causa de su orgullo y su impaciencia un mal terrible, un espíritu de la oscuridad y reflejo de su soberbia, y que si toma control de su cuerpo, extenderá un mal sin igual por todo el mundo.


Cambié toda la luz del sol, y las ciudades y las tierras lejanas por un puñado de poder, por una sombra, por la oscuridad. 


-No sé qué era esa cosa que se lanzó sobre mí.

-Tampoco yo lo sé. No tiene nombre.


        Este primer libro es la gesta de un joven mago tratando de reparar el mal que desató por el mundo, y aprendiendo sobre los peligros del orgullo. La primera de las aventuras de este gran mago, y aquella en la que no solo ganó un poder temible, sino también en la que aprendió el don de la sabiduría y la humildad.  


Ged, su amigo Algarrobo, y la sombra que ha invocado tras él. Deberían ser algo mas morenos para mi gusto, pero bueno.


        En Las Tumbas de Atuan (para mí el mejor de la saga de lejos), publicado en 1971, Le Guin da un giro de 180º, y nos encontramos en las tierras kargas, en las oscuras, prohibidas y sagradas Tumbas de Atuan. Desde este lugar, en un recinto tipo monasterio prohibido, una facción de sacerdotisas (auxiliadas por un grupo de eunucos, por lo demás está vedado a los hombres) rinde el más sacro de los cultos a las divinidades kargas: el Rey Dios y los Dioses Gemelos. Al frente, cada uno tiene su Suma Sacerdotisa y su templo. Pero existe un tercer culto, uno más oscuro y antiguo, y en parte incluso más sagrado por el temor que suscita: el culto a los Sin Nombre, los Poderes Antiguos que rigen los sectores más profundos de la magia. Este culto tiene su propio templo, pero solo una sacerdotisa, que al mismo tiempo es la más sagrada y poderosa del monasterio: Arha, la Devorada. Arha es una mujer elegida entre las niñas de Atuan, nacida exactamente en el mismo día y hora que murió la anterior, y se supone que es la misma persona reencarnada. Un ser que se supone que se rencarna infinitamente para rendir culto y al mismo tiempo ser la voz en la tierra de los Sin Nombre.


-Tu eres la dueña de todo eso, del silencio y la oscuridad.

-Todo cuanto yo conozco es la oscuridad, la noche subterránea. 


No tienen nada que dar. No tienen el poder de hacer cosas. Solo tienen poder para oscurecer y destruir.


        Las Tumbas de Atuan es el recinto más sagrado de todas las tierras kargas, e incluso el Rey Dios tiene que rendir cierto respeto y obediencia hacia este lugar (aunque como tiene su propia Suma Sacerdotisa allí, también ejerce cierto poder), pues en este imperio religioso, las tumbas son el centro de todos los cultos. Y la Devorada es la persona ante incluso el Rey Dios debe doblegarse, pues ni siquiera él se atreve a oponerse a los Sin Nombre. Aunque como vive confinada en las tumbas, tampoco es que participe activamente en la política karga, el Rey Dios se limita a mandarle sacrificios de vez en cuando y mantener la política alejada de ese lugar maldito.

  

Templo de las Tumbas de Atuan.

        Nuestra protagonista es Tenar, la nueva Arha, quien ha sido criada desde niña para ser otra persona y al mismo tiempo todas las que le precedieron, anulada como persona única, su niñez, arrebatada en sacrificio a un rito olvidado. Ha sido “devorada”, y la nueva Arha aprende a esgrimir el poder del que es depositaria, y ejercer sus terribles responsabilidades y malévolos ritos a sus oscuros amos. Pese a ello, Tenar, en parte gracias a la ayuda de un eunuco, nunca llega a olvidar del todo su verdadero nombre ni quién es. Esto cambiará para siempre cuando recibe la visita de un joven mago del archipiélago que se encuentra en una misión legendaria.

        Es un libro muy interesante que habla sobre el poder ejercido por las mujeres, el poder religioso que reside en ellas. La magia no esta prohibida en el archipiélago, pero solo los hombres la ejercen alcanzando posiciones de alto poder (se reservan los puestos de magos, las mujeres solo pueden ser brujas de pueblo), pero sin embargo en Kargard las mujeres son las máximas depositarias de su contraparte: la religión. En Kargard hay sacerdotes, pero la máxima sacralidad es la de las sacerdotisas de las tumbas. Aun así, viven relegadas, ya que pese a esto, se las mantiene aisladas en las Tumbas, e intervienen poco en política. Y la figura de máximo poder, Arha, es la más anulada, tanto que se llama la Devorada. Le Guin abre aquí un interesante melón sobre el debate de los géneros, y las posiciones de poder ocupadas por las mujeres. Una sociedad matriarcal, pero donde lo matriarcal ha sido anulado en un exilio por un culto sacerdotal masculino, androcéntrico y machista. Además, también habla sobre la violencia psicológica (la Devorada) y sobre la violencia ejercida de mujer a mujer: a fin de cuentas el culto es controlado y sostenido por mujeres, las propias sacerdotisas, allí en las Tumbas. Ellas son quienes anulan a Tenar-Arha.


Te educaron para ser esclava, pero has roto tus ataduras.


        El tercer libro es La costa más lejana (1972), donde Terramar es sacudida por una extraña maldición: la magia está perdiendo poder, las canciones se olvidan, las tierras mueren, y las personas, animales y hasta dragones enferman y se vuelven locos. El origen del mal parece estar en un mago oscuro que en alguna parte del mundo ha liberado esa enfermedad. Alguien intenta destruir el equilibrio. Un ya maduro y poderoso Ged decide salir al mar en su pequeña barca, la Miralejos, en busca del mago oscuro, para frenar toda esa locura antes de que consuma todas las islas. Y lo hará con la única compañía de un joven príncipe del territorio de Enlad. Probablemente el libro más aventurero de la saga.


Negar el pasado es negar el futuro. El hombre no construye su destino: lo acepta o lo niega.


        Con la cuarta parte, la autora vuelve a cambiarnos la vista del todo: Tehanu (1990). Con un Ged gravemente debilitado tras su anterior batalla y retirado en su Gont natal, tenemos de nuevo de protagonista a Tenar. Esta vez una Tenar que viven en Gont, mayor, madura, que ha aprendido de la vida y se ha vuelto sabia, ha elegido exactamente el tipo de mujer que quiere ser, y lo ha hecho conociendo sus opciones y valorándolas, lo cual ya es un poder en sí mismo. Tenar es una mujer respetada en las islas y conocida, que podría ocupar una posición, pero ella ha elegido vivir libre y cómoda en Gont, a su aire. Prácticamente sin ser nadie. Pero sí que es alguien. Es Tenar, y ella lo sabe (y algunas pocas personas más), y le basta. Tenar adopta a una niña pequeña criada por su familia en el maltrato y el abuso, cuya mitad del rostro fue quemado en una hoguera dejándola tuerta. Tenar la cría como si fuera su hija, le llama Therru, la ama, comprende sus traumas y le da un hogar y una educación, ayudada por algunas otras  mujeres como la vieja pero extrañamente sabia (a su manera) bruja Musgo.


Therru.

        De nuevo tenemos un libro que nos habla sobre lo que significa ser mujer, tanto en nuestra sociedad (hay interesantes metáforas) como en el mundo de la fantasía. Para ello se vale de distintos ejemplos de mujeres: Tenar una mujer libre de un poder propio, de los nuevos tiempos, la extraña victima Therru, Musgo: una mujer que ejerce poder, aunque este poder este controlado realmente por los hombres (la magia). Musgo es muy interesante, es una mujer conocedora de su propio poder pero que no puede evitar pertenecer a una época pasada, ser de los viejos tiempos, y eso hace que tenga algunos pensamientos del pasado, incluso machistas. Pero es sabia. Tenar también es increíble, en el pasado fue la mujer mas sagrada y temida de Kargard, ostentaba un poder místico, secreto, terrible, oscuro; ahora ella misma ha elegido renunciar a la alta sociedad, a la magia, a cualquier cosa que pudiera exigir, para poseer el poder de ser libre, y no le constriñe el hecho de ser no poseer el poder de comandar tropas o pueblos, o no poder alterar el clima con magia. Y es que de eso habla este libro, de los espacios de poder de las mujeres. Un libro con apenas acción, todo reflexiones, conversaciones, escenas de cosecha o caminata, dudas, etc.

        El quinto libro es una recopilación de cuentos, que se recopilaron en este volumen: Cuentos de Terramar (2001). El primero de los cuentos, El Descubridor (2001) nos cuenta los primeros tiempos de la Escuela de Roke, la historia de algunos de los protagonistas de su nacimiento. Rosaoscura y Diamante (1999) es una historia de amor y magia ocurrida en cualquier momento de Terramar. Los huesos de la Tierra (2001) es la epopeya acerca de cómo Ogion (maestro de Ged) ganó su fama, y sobre la importancia de un buen maestro. En el Gran Pantano (2001) es un cuento sobre la importancia de usar bien el poder, ocurrida entre el segundo y tercer libro. Y finalmente Dragonvolador (1998) ocurre después de Tehanu y nos habla de una joven chica que encierra un gran poder en su interior. Este último cuento une con la última novela.

        Finalmente, la novela final: En el otro viento (2001). Las consecuencias de las novelas pasadas se están precipitando hacia un final catastrófico. Y el peor de los destinos se avecina: en la Tierra Seca (el lugar al que van a parar los muertos del archipiélago, un lugar árido, cruel y triste donde las personas vagan sin ilusión alegría ni esperanza eternamente) los muertos están tratando de atravesar el muro que separa la vida de la muerte. El desequilibrio está a punto de desbordar el mundo, y los protagonistas aun no conocen la clave para reequilibrarlo.



La Tierra Seca.


        Son unos libros que desbordan filosofía, lirica, poesía. Eso sí, no hay acción prácticamente. No hay batallas de magos o contra criaturas del averno, sino una magia lirica que transmite mucho acerca del mundo y de la sociedad. Le Guin pretendía que la fantasía no tenía porque ser batallas, magia de batalla y ejércitos. Ese no era el mundo de fantasía que ella quería transmitir. Y eso que era profunda admiradora de Tolkien, pero de alguna manera revirtió el libro. En esta saga todo sucede alcanzando pactos, con la magia, entre facción humanas, con dragones. Se llegan a acuerdos, se reinstauran equilibrios. No se mata para alcanzar soluciones de trama, no alcanzan respuestas simples. Quien esperé una fantasía de guerras, de acción, o de grimdark, desde luego esta no es su marca de vodka.

        Lo mismo para los personajes: todo son aprendizajes hacia una evolución trascendental, personajes muy reflexivos. No hay un regodeo en la tortura y la maldad, el monstruo necesario, etc. como mi amado Glokta de La Primera Ley. Son libros que hay que leer en su contexto.


Un sabio no pregunta, y un necio pregunta en vano. 


        Ursula K. Le Guin reflexiona muchísimo sobre las mujeres y sobre cómo ha evolucionado su visión, en el mundo, en la literatura, y en la literatura concretamente de fantasía, y sobre sus espacios de poder. Sobre las diferencias de género. Pero también sobre la muerte, la religión, el celibato como mecanismo de poder, sobre conceptos asociados comúnmente a la fantasía, etc. Como todos los libros de Le Guin, son un grito de su autora a la sociedad, una llamada sobre conceptos que ella creía importantes. A veces es posible que no estemos de acuerdo con alguno, y es que estos libros tardaron varias décadas en escribirse, y como la propia autora menciona en algunos apéndices, ella misma evolucionó. Y se sigue evolucionando. Es posible que haya cosas que estén ya algo desfasadas, y se hayan superado, pero han sido unos libros importantes para reconceptualizar el género (entre otras cosas) en nuestros reinos de fantasía, ella marcó una dirección que nosotros hemos seguido.

        En este aspecto concreto, el tema del genero y las mujeres, y su situación, Le Guin fue revolucionaria a unos niveles que requeriría una tesis doctoral analizar. Ella no se limitó a posicionar mujeres magas para reflejar que las mujeres pueden alcanzar el mismo espacio y nivel que los hombres, no. Ella planteó una sociedad machista a largo plazo, cristalizada. Las mujeres pueden acceder a la magia, pero su poder es despreciado como menor, y al mismo tiempo temido. Al haber sido marginadas de la enseñanza reglada y de la Escuela de Roke, las mujeres han aprendido a su manera, a través de tradiciones que se pasan de maestra a discípula y mas ligadas a las Antiguas Potestades (los poderes primordiales originales, la tierra, la naturaleza, las esencias de todo), lo que podemos relacionar a la brujería tradicional de nuestro mundo, un culto ctónico. Y la Escuela de Roke, la magia de los hombres, que ha intentado controlarlo todo (muy de hombres), teme aquello que no puede controlar: las Antiguas Potestades, el poder primordial. Y por ello, también teme la magia femenina y a las mujeres, a las brujas. Los hombres fortificaron su centro de poder, Roke, cerrándolo a las mujeres, y lo sellaron de forma tan profunda, que ser célibe se convirtió en requisito indispensable para ser mago: ningún hombre de poder podía ser contaminado con el sexo por una mujer. Podemos observar esto en nuestra religión: las monjas nunca pueden pasar de madres superioras, los hombres tienen muchísimo mas rangos que alcanzar, hasta el papado, y por supuesto, se debe mantener el celibato.

        Estos hombres magos no son crueles tiranos que tratan de someter a la mujer. En general son buenas personas, tratan de ayudar, se preocupan por los demás. Pero están atrapados en la tradición, una tradición y unas reglas que relega a la mujer. Y las mujeres también están atrapadas por esa tradición, incluso las brujas, ellas mismas no se ven capaces de alcanzar la magia de Roke, eso pertenece a los hombres. Incluso Tenar, que pertenece a la nueva era (creo que Le Guin se identificaba mucho con ella), aun se sabe constreñida, aunque lucha por su libertad con toda su fuerza. Estos libros no significan una revolución que termina con un cambio de todos los niveles, no se derriba la estructura. Significa trazar un camino. Seguir ese camino requiere muchos años, décadas como poco, y es una historia que la autora dejó a nuestra imaginación. Pero todo debe tener un principio. Es una historia de décadas de duración sobre como Terramar empezó (solo empezó) a abandonar un periodo petrificado y rígido. Creo que el único autor que ha llegado, en novelas, ha ser tan preciso con este tema, fue Terry Pratchett, aunque utilizará un mecanismo mucho mas humorístico y ademas sus libros son posteriores (de hecho, es posible que se inspirará en parte). 


¡Una maga! ¡Quizás eso lo cambiaria todo, cambiaría todas las reglas!  


        Ursula K. Le Guin es una escritora (ciencia ficción y fantasía sobretodo), poetisa, pensadora, y filosofa (para mí) nacida en 1929, muy influida por las escuelas de la antropología cultural, el taoísmo y el feminismo. Sus obras, especialmente las del universo de Terramar y el universo Hainish (La mano izquierda de la oscuridad), y ella misma, han tenido una influencia espectacular en el mundillo: alcanzando a autores como Neil Gaiman. Comenzó a alcanzar reconocimiento principalmente en 1968 con Un mago de Terramar, y ya no paró de recibir nominaciones y premios. Murió en su casa de Portland, en 2018, a los 88 años, posiblemente de un infarto.

        Entre las obras más famosas que inspiró que podemos detectar están Eragon (la cuatrilogía de El Legado) de Christopher Paolini y Crónicas del Asesino de Reyes de Patrick Rothfuss (El Nombre del Viento). En ambos podemos ver la influencia del concepto de la nominación de utilizar el poder de decir el nombre verdadero de algo para someterlo. El personaje de Kvothe es como Ged: de joven es llevado por su soberbia, más mayor descubre lo vano que es eso. El videojuego de Skyrim también tiene muchísima influencia de estos libros.

        Desde luego son libros para leer tranquilamente, reflexionando, pensando, etc. Yo he tardado un año y poco en leerlos todos, con la calma. He de admitir que a veces se te hace pesado, tanta reflexión, pero es lo que ella pretendía, y me han encantado. He pensado mucho.


-¡Pero si aún no he aprendido nada!

-Porque no has descubierto lo que estoy enseñándote.


        Hay muchas ediciones para leerlos, pero yo recomiendo la última edición sacada por Minotauro: Los libros de Terramar. Edición completa e ilustrada (ilustraciones de Charles Vess). Se puede comprar en cualquier libreria, en Amazon, o directamente en la web de Minotauro en este enlace. Esta edición nos trae TODA la obra de Terramar. Completa, casi 1.300 paginas de tamaño grande y letra relativamente pequeña, pesa como un muerto. Es cara, unos 50€, pero es una verdadera pasada, es una gozada leer libros así. Aparte de todo lo antes mencionado, incluye algunos cuentos cortos que no suelen venir en las recopilaciones, como La regla de los nombres (1964) o La palabra de la desvinculación (1964), así como el apéndice sobre la historia y cultura de Terramar: Una descripción de Terramar. Trae también el mapa de Terramar de la autora, además de los mapas de las Tumbas de Atuan. Muchos apéndices reflexivos de Le Guin acerca de los distintos libros, y su reflexión final sobre su obra Terramar revisada (1993). Además de un montón de ilustraciones chulísimas, muchas de ellas en color. Estas ilustraciones, obra de Charles Vess, son las únicas que para Le Guin reflejaban verdaderamente la esencia de su obra (incluyendo la raza oscura de sus protagonistas). 



Portada de la edición completa de Minotauro de Los libros de Terramar.













Algunos ejemplos de las ilustraciones, el mapa, la portada, etc..

        En cuanto a adaptaciones, en 2004 SciFi Channel sacó una adaptación libre de Un mago de Terramar y Las Tumbas de Atuan, que se tituló La leyenda de Terramar. Se sacó en modo miniserie de dos capítulos, unas 3 horas de duración entre las tres. Es un puto desastre, y mira que tenían horas de metraje para ser decentes. Pero basura a saco. Unos efectos especiales y ambientación cutres de cojones, y se pasa la obra original por el forro. La ambientan en la Edad Media, todos los personajes (menos Ogion) son blancos, es una sociedad feudal al uso, y la convierten en una historieta de magia medieval normativa, simple, y nada destacable (excepto por lo cutre). La historia tiene que ver entre 0 y nada. Evidentemente Le Guin la criticó y no la aprobó, y eso que en general se calló. En 2006, Studio Ghibli sacó una adaptación de animación (anime), llamada Cuentos de Terramar. Pese al nombre, no se basa en ninguno de los cuentos, si no que adapta principalmente En la costa más lejana y un poco de Tehanu. Pese a que supone una mejor, y hay cosas estéticamente bonitas, sigue pasando la mayor parte de la obra por el arco del triunfo, nerfea y reduce hasta el absurdo las cicatrices de Therru y Ged, vuelve a poner a todos los personajes como blancos, retira el acento acuático y sobre el mar de la saga, etc. Se puede ver, pero como adaptación sigue siendo basura. Como admiradora de las obras de Hayao Miyazaki (Studio Ghibli), Le Guin se sintió profundamente decepcionada con esta película. No la dirigió Hayao, sino Goro Miyazaki, su hijo, y el propio Hayao consideraba que Goro no estaba listo para dirigir una película (e intentó que la productora no le pusiera al mando), y criticó el trabajo de su hijo, aunque lo aceptó.  

        Le Guin siempre lamentó que los directores y equipos creativos de sus adaptaciones, los ilustradores que se encargaron de las portadas de sus obras o de imágenes de propaganda, etc. en general omitieran que sus personajes eran negros. Siempre los retrataban como blancos. Las propias directrices de las editoriales decían que la sociedad no estaba preparada para aceptar una sociedad fantástica no medieval y negra, y por eso la "blanqueaban". Puro interés económico, otra de las cosas que Le Guin despreciaba. En general, muchos lectores omitían que Ged era negro, y lo imaginaban blanco y fuera. 



La leyenda de Terramar (2004).


Cuentos de Terramar (2006).

        En general es una saga muy recomendable de leer si buscas un estilo más reflexivo, diferente, que se aleje totalmente del mundo de la violencia, la espada, la ambición y el poder. Y a mi me encantan esas tramas, pero Le Guin se dio cuenta que existían otras historias aparte de estas, y también merecían ser contadas. Ha tenido una influencia enorme en la fantasía, su concepción de las figuras femeninas en la estructura narrativa creo que ha sido crucial para evolucionar en este aspecto dentro de la literatura. Sus historias están llenas de poesia, magia, lirismo, filosofía, transcendentalidad... Si vuelves a leerlos, descubres nuevos significados ocultos tras las palabras, nuevas sabidurías. 




BALADA DE PÁJAROS CANTORES Y SERPIENTES - SUZANNE COLLINS

          Tras 10 años de parón, la autora de Los Juegos del Hambre ha sacado esta precuela de su saga: Balada de pájaros cantores y serpien...